La piel se eriza al entrar en la basílica de Nuestra Señora de los Ángeles, en Cartago, y ver a decenas de personas caer de rodillas mientras avanzan por la nave central en su tránsito hacia el altar, donde los espera ‘La Negrita’. Ahí no importa el cansancio, ni las horas de caminata acumuladas. Solo el poder de la fe puede mover esos cuerpos agotados, y agobiados también, que llegan repletos de agradecimiento y súplicas ante la patrona de Costa Rica.
Dos años pasaron para volver a ver esas imágenes fluir hacia el altar. La pandemia y todo lo que ella arrastró en vidas, enfermedad, trabajos... detuvo una tradición de 238 años, que este fin de semana fue retomada por cientos de romeros de todas partes del país, luego de que el Ministerio de Salud autorizara reiniciar la tradición. Un equipo de La Nación captó estas imágenes, entre muchas más, la mañana de este 23 de julio.
Los hermanos Cristian y Pamela Carvajal Mesén (de rayas y camiseta blanca) llegaron a la basílica de Cartago cerca del mediodía. De rodillas, cruzaron la nave central hasta llegar a los pies de 'La Negrita' mientras las lágrimas afloraban. Según dijeron, son lágrimas de agradecimiento. También dejaron sus peticiones a la patrona de Costa Rica. Foto: (Rafael Pacheco Granados)
Los alrededores de la basílica de Nuestra Señora de los Ángeles, en Cartago, fueron el escenario de una gran congregación de romeros a diez días de celebrarse el día de la Virgen de los Ángeles. Foto: (Rafael Pacheco Granados)
Dariana ayudó a su papá, Kenneth Barboza, a rociar agua bendita en los pies de su hermana, Aidana, de 15 días de nacida. Ellos son vecinos de Dulce Nombre de Cartago. Foto:
(Rafael Pacheco Granados)
Ana Hidalgo, de 54 años, caminó descalza desde paseo Colón con su hijo Brandon Cubero. Esta vecina de Sachí ofreció la romería por sus hijos, para que Dios y la Virgen los proteja y siempre les vaya bien en la vida, dijo. Foto:
(Rafael Pacheco Granados)
Cientos de fieles acudieron a la basílica en el primer año de la romería después de que esta tradición religiosa católica estuviera suspendida por la pandemia. Foto:
(Rafael Pacheco Granados)
Las filas para el agua bendita se hicieron extensas. Una visita a Cartago no puede finalizar sin ir a la pileta de la Virgen. Foto: (Rafael Pacheco Granados)
Luis Gómez Mora (al centro) tiene 68 años. Caminó la mañana de este 23 de julio desde la catedral de San José hacia la basílica de Nuestra Señora de los Ángeles para agradecer por su salud y su familia, pero también por ver a Cartago campeón. "Ya puedo morir en paz", reconoció con una sonrisa que no se le ha quitado desde el 6 de julio. Foto: (Rafael Pacheco )
Ronald Cervantes Mora caminó desde Concepción de La Unión junto a su esposa, Olga Marta Bonilla Barrantes, y su hijo, Ronald Uriel, Cervantes Bonilla, de 7 años. El pequeño es autista y sus padres lo llevaron por primera vez a la romería con la intención de que 'La Negrita' lo proteja y les dé a ellos fuerzas. Foto: (Keyna Calderón )
Tuvieron que pasar dos largos años para volver a ver estas imágenes en la ruta hacia Cartago. La pandemia canceló la romería en dos ocasiones y este 2022 retornan los romeros. La diócesis de Cartago les pide cumplir con las medidas sanitarias para prevenir la covid-19. Foto: (Rafael Pacheco )
María Nidia Cubero González es de Sarchí. Camina junto a un grupo de romeros de Palmares y San Carlos, en Alajuela. Empezó su romería descalza desde que salió del paseo Colón, en el centro de San José, a primera hora de la mañana de este 23 de julio. Lo hace, dijo, por la vocación de sus hijos. Es la primera vez que hace la romería. Foto: (Keyna Calderón para GN )
Colaboraron en esta información la corresponsal Keyna Calderón y la periodista Ángela Ávalos.