Empresarios denuncian trabas a generación con paneles solares en momento de alzas en electricidad

Industriales y comerciantes piden correcciones en tarifas para generación distribuida que consideran un obstáculo a producción limpia y útil para aliviar gastos en combustibles

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

La Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR) expresó este miércoles su preocupación por las trabas a la generación distribuida, que es una opción para producir electricidad con paneles solares en casas y empresas.

También la Cámara de Comercio, la Cámara Costarricense Norteamericana de Comercio (Amcham), la Asociación Costarricense de Productores de Energía y la Cámara Costarricense de la Construcción se unieron en un llamado a la Asamblea Legislativa y a la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) a intervenir.

A pesar de contar con una ley emitida en diciembre de 2021, la inversión en generación distribuida corre el riesgo de quedar frenada debido a las tarifas aprobadas recientemente por la Autoridad que, según la CICR, desincentivan las nuevas instalaciones.

La generación distribuida es una oportunidad para aprovechar el avance tecnológico y ampliar la oferta de energía renovable en el país, expresó Sergio Capón, presidente de la Cámara. Para él, es necesario considerar en las tarifas los costos para el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) de dicha actividad pero, todavía más, sus beneficios.

Capón hizo énfasis en que la actividad podría generar ahorros significativos en combustibles fósiles, en el rango de miles de millones de colones, al tiempo que ayudaría a reducir la dependencia de la generación térmica en horas pico durante el 2024.

Esta alerta llega una semana después de conocerse que el precio de la electricidad aumentará a partir de enero 17,13% para clientes del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y 15,8% para los abonados de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL).

El incremento pagará los gastos en generación térmica del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) este año y los previstos para el próximo.

Esos aumentos, alertaron los industriales, resultan de debilidades del SEN evidenciadas este año por la reducción de las lluvias que alimentan los embalses para generación hídrica, debido al fenómeno El Niño.

La CICR recordó este miércoles que, según la División de Operación y Control del Sistema Eléctrico del Instituto, la hidroelectricidad representa 68,12% de la capacidad instalada del país para generación eléctrica.

Por esto la CICR cree que, en la coyuntura actual, las nuevas tarifas impuestas a los generadores con paneles solares provocan molestia y preocupación al percibirse como un obstáculo a un estilo de producción de energía limpia la cual, en mayor densidad, aliviaría la presión sobre el SEN para suplir la demanda energética.

Amcham indicó en un comunicado que era urgente eliminar todas las trabas que se han incluido en el desarrollo de los recursos distribuidos e hizo referencia directa a las modificaciones metodológicas aprobadas por Aresep.

En un comunicado, esa organización dijo que esos cambios “han significado aumentos de hasta 400% en los costos que deben pagar todos los prosumidores (productor-consumidor) que han optado por este esfuerzo renovable”.

A revisión

Este 18 de diciembre, la Aresep organizó una reunión urgente con operadores del SEN ante la avalancha de quejas y dudas de cámaras sectoriales por los fuertes aumentos en cobros de luz a generadores distribuidos, luego de introducirse en octubre tarifas a la actividad.

Según el ente regulador, el nuevo método de cálculo tarifario iba a impulsar la colocación de paneles solares. Al menos ese era el espíritu de la Ley N° 10.086 Promoción y Regulación de los Recursos Energéticos Distribuidos a partir de Fuentes Renovables, diciembre de 2021.

No obstante, podría ocurrir lo contrario.

La Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) cobró en octubre hasta 400% más por la electricidad a algunos de estos abonados (tiene 1.300 generadores distribuidos), por lo que hubo clientes cuyo recibo de luz creció de ¢25.000 a ¢128.000 entre setiembre y octubre.

Este tipo de situaciones son las trabas a las cuales hicieron referencia los industriales este miércoles.

Esa organización coincidió con la Cámara de Generación Distribuida, la cual calificó las nuevas tarifas como un castigo para quienes invirtieron en paneles solares porque, tal y como quedaron los precios, ahora se le cobra por el mero hecho de operar sus paneles fotovoltaicos.

La posición de la CGD es que ese tipo de componentes en el nuevo método tarifario representa una distorsión que hace inviable el aprovechamiento de la generación distribuida entre abonados residenciales y para la pequeña industria y comercio, que enfrentarán alzas inminentes a partir de enero.

Durante la reunión del 18 de diciembre, la Autoridad se comprometió a revisar su metodología mientras que la CNFL admitió errores en los cobros de octubre los cuales explicarían los altos recibos de ese mes y que, según esa distribuidora, serán corregidos en próximas semanas.