Incumplimientos provocan cierre de siete centros de manejo de vida silvestre

Medida se aplicó por falta de requisitos o permisos. Viceministro de Ambiente confirma que establecimientos forman parte de una lista de 36 que la Fiscalía solicitó revisar

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

El incumplimiento de los requisitos para operar condujeron al cierre de siete centros privados de manejo de animales silvestres.

Franklin Paniagua Alfaro, viceministro de Ambiente, confirmó que los locales forman parte de una lista de 36 que la Fiscalía General de la República solicitó revisar, en un oficio de mayo de 2020.

En ese documento, se pidió al Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) proceder con el cierre en caso de que se determinara que estos sitios operaban sin permisos o sin requisitos básicos, como la presencia de un regente responsable del plan de cuido de los animales.

Según Paniagua, de los 36 sitios mencionados en el oficio FGR-451-2020, había 16 con irregularidades muy graves, entre ellos seis de los que fueron cerrados y cuyos nombres se reservan las autoridades.

De esos seis, tres se localizan en el Área de Conservación Arenal Huetar Norte, en los cantones de Alajuela, Palmares y San Carlos; dos, en Quepos y Osa (Puntarenas); y otro, en Sarapiquí (Heredia).

A todos, el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) les solicitó en varias ocasiones una actualización de los planes de manejo, así como adecuaciones para operar conforme a los parámetros establecidos por la ley y el reglamento vigente.

Hay tres, incluso, que comenzaron a gestionar la renovación de permisos, luego de introducir cambios. Los restantes aún requieren visitas adicionales para verificar los ajustes.

Por otra parte, el sétimo establecimiento en proceso de cierre se ubica en Heredia.

Ese último forma parte de un grupo de 20 que presentaba irregularidades menos graves. De esos, dos están renovando permisos y ocho están al día con su actividad.

“Hay lugares donde el procedimiento es más ordenado y con la misma colaboración de los encargados al hallarse en condición de abandono. Esto ha facilitado el cierre”, explicó el funcionario.

Sobre los otros nueve, la condición es incierta a falta de inspecciones.

El viceministro de Ambiente explicó que el recorte de recursos dejó congeladas nuevas diligencias, pues se quedaron sin dinero para gasolina y viáticos.

Según indicó, sería necesaria la aprobación de un presupuesto extraordinario para continuar con las visitas y proceder con el retiro de animales, de ser necesario.

En esos casos, precisó, primero se diseñará un operativo para la evaluación del sitio, un plan de traslado y la localización de lugares aliados al Ministerio para llevar los animales.

Relación ‘moderada’

La solicitud que hizo la Fiscalía desde 2020 se dio luego de detectar posibles anomalías en la supervisión que debe aplicar el Sinac sobre el cuido que estos centros privado brindan a los animales que tienen en cautiverio.

También se detectó la presunta comisión de delitos por parte de los permisionarios de los establecimientos y de funcionarios públicos responsables de supervisarlos.

El objetivo de estas acciones es reducir posible acciones irregulares como tráfico ilegal de especies, maltrato y o riesgo de zoonosis (transferencia de enfermedades entre animales y humanos y viceversa).

Aparte de verificar cambios y detectar medidas pendientes, las autoridades también reactivarán una campaña para detener la práctica de que los visitantes de esos centros se tomen fotos con animales (selfies) y que les den alimento.

“Todos debemos moderar la relación con la vida silvestre de forma más apegada a la ciencia, y en particular por lo que nos está ocurriendo con la pandemia”, insistió el viceministro.

Como parte de esas acciones, el Sinac notificó este lunes a los encargados del Parque de Aventuras Ponderosa, en Liberia, Guanacaste, que tienen 10 días hábiles para eliminar la práctica de permitir a sus visitantes alimentar animales y posar con ellos.

Según las autoridades, ese establecimiento se había comprometido desde noviembre a realizar una serie de cambios luego de varias llamadas de atención al respecto.

En ese plazo, los responsables del lugar deberán ejecutar un plan de anticoncepción presentado por la misma administración de Ponderosa al Sinac, debido a que no puede reproducir animales silvestres en cautiverio por ser un zoológico comercial.

Este martes, La Nación consultó de nuevo al empresario David Joseph Patey, representante Legal de Ponderosa Adventure Park, sobre la razón del incumplimiento de los acuerdos con Sinac y eventuales riesgos para la actividad.

No obstante, como ocurrió el lunes, declinó referirse al tema.

La Fiscalía Ambiental de Guanacaste, con sede en Santa Cruz, investiga desde el año pasado un posible caso de comercio ilegal de especies silvestres exóticas en cautiverio por parte de la empresa de Patey.

El caso se abrió en mayo del 2020 poco después de que una cebra macho se escapara del camión en que era transportada a una finca en San Carlos.

Voceros del parque dijeron entonces que el incidente pasó durante el transporte del animal que era una donación para un sitio que, según indicaron, tenía permiso de operación como santuario.