Incopesca arrastra años con debilidades en auditoría interna, alerta Contraloría

De tres plazas asignadas en Auditoría, una sigue vacía desde hace un año. Informe interno del 2019 advertía necesidad de al menos seis puestos para labores de control interno

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El Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (Incopesca) incumple aspectos significativos de la normativa de control interno, por debilidades de organización y funcionamiento de su Auditoría Interna, alertó la Contraloría General de la República (CGR).

Esta situación se arrastra desde el inicio de la actual administración, según el ente contralor, por lo cual esa área tiene un cumplimiento bajo. Se supone que el promedio de auditorías e investigaciones originadas por denuncias era de tres por año, pero dicho promedio se ha incumplido a partir del 2022, revela la auditoría n.° DFOE-SOS-IAD-00014-2023 del 20 de diciembre anterior.

Según ese informe, la administración de Incopesca no ha adoptado acciones para suplir ausencias temporales o permanentes de esa unidad que, por más de dos años, ha funcionado con dos de las tres plazas asignadas.

Para ilustrar el tamaño del problema, la CGR indica que en durante el 2019 el anterior auditor interno elaboró un estudio sobre necesidades de recursos entre personal y materiales.

Según ese reporte, se requerirían 71 años (a partir de una ocupación plena de tres plazas y tres estudios anuales) para que la Auditoría fuera capaz de cubrir todo el universo auditable compuesto por 213 actividades en Incopesca, ligadas a 146 procesos del Instituto.

Sin embargo, ese estudio técnico del 2019 ya indicaba que, para cubrir los temas de mayor riesgo en un plazo razonable, la Auditoría Interna necesita nueve plazas en total.

“Se reitera que no constan actividades o acciones por parte de la Administración Activa para propiciar la dotación del personal mínimo necesario, según lo indicado en el estudio técnico antes citado”, dice textualmente la auditoría.

Según información suministrada por las propias autoridades de Incopesca, el 2024 arrancará con una plaza vacante, que cumple un año sin suplirse.

Asimismo, alerta la CGR, Incopesca tampoco ha adoptado acciones para asegurar la continuidad del trabajo de su Auditoría Interna, pues no tiene un mecanismo para suplir las ausencias temporales en alguno de los tres puestos existentes y no hay alguien definido que asuma dicho cargo ante ausencias temporales o permanentes del funcionario o funcionaria titular.

Ministro responde

Heiner Méndez Barrientos, ministro de Pesca y Acuicultura y jerarca de Incopesca, declaró este 27 de diciembre que hace dos años se pensionó el auditor anterior, luego de lo cual su administración inició un proceso para suplir la plaza.

Sin embargo, recordó que dicho nombramiento debe recibir el visto bueno de la propia CGR y, según él, entre conseguir ese aval y los tiempos que requiere el trámite, todo el proceso demoró siete meses.

Cuando se logró sacar el concurso, una persona quien ya ocupaba otra plaza en la Auditoría fue la única candidatura con la idoneidad y requisitos para atender el cargo titular. Esa persona es María Arroyo Sánchez, actual Auditoria Interna de Incopesca.

De acuerdo con el ministro, su llegada al puesto dejó entonces otra silla vacía en esa misma dependencia y, otra vez, se inició lo que llamó “otro largo proceso”, pues adujo una falta de interesados en el anterior cargo de Arroyo Sánchez, dispuestos a trasladarse a Puntarenas.

Méndez Barrientos dijo que Arroyo Sánchez quedó nombrada en febrero de 2023 y, de inmediato, empezaron a buscar nombres para suplir su plaza anterior pero, “con tan mala suerte”, dijo el ministro, que quienes concursaron incumplieron requisitos para asumir dicha posición laboral.

En resumen, admitió el ministro, la plaza permanece vacía al cabo de un año como lo detectó la Contraloría.

Eso sí, recalcó el jerarca, ese faltante supuestamente no es culpa de la entidad, pues el funcionario atribuyó todo a la lentitud de los procesos en la administración pública, los cuales declaró “complicados”.

De todos modos, la CGR le ordenó a él y el resto de la Junta Directiva del Instituto asignar a la Auditoría Interna al menos tres plazas permanentes adicionales para un total de seis para el desarrollo de sus labores de control interno y a Méndez Barrientos que nombre el puesto vacante en la actualidad.