Este viernes quedó instalado en el templo de la Iglesia San Juan Bautista en el centro de Tibás el reloj automático que, junto con dos nuevas campanas, completan el sistema que en adelante llamará a los tibaseños a misa.
De acuerdo con el párroco Roberto Salazar, las campanas viejas eran de 1940 y fueron elaboradas con material fundido en la estación del ferrocarril en San José.
Acotó que el nuevo sistema tiene un costo de ¢31 millones.
Las campanas tienen el logotipo de la Iglesia de Tibás, así como el nombre de cada una, el año de fabricación y el nombre de la empresa.
Una de ellas se llama Juana en honor al patrono (San Juan Bautista) y la otra Valvanera, debido a que en esa Iglesia se venera el hallazgo de la Virgen de Valvanera, acaecido en España.
Fueron elaboradas con motivo de los 150 años de vida parroquial en Tibás y de hecho así quedó inscrito en una letras de relieve. La empresa fabricante es Prisma campanas y relojes Me Fecit.
Los recursos para comprar las campanas y el reloj provienen de la feligresía que, organizada por el párroco, realizó rifas y otras actividades desde varios meses atrás
Las viejas campanas quedaron colgadas de un soporte de cemento al costado sur del templo.
El reloj tiene iluminación propia y resalta en las noches frente al parque de este cantón que originalmente se llamó San Juan del Murciélago.
El cura párroco dejó el sistema listo y ahora -a raíz de los cambios dictados por el arzobispo de San José a finales de octubre- se apresta para asumir su nueva parroquia que será la de Santa Ana a partir del 29 de noviembre.