Costa Rica estrena inspectores de empresas industriales de gas

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Juan Fernando Lara S.

Costa Rica graduó ayer a los primeros 22 ingenieros especializados en la inspección de las instalaciones industriales de gas. Ellos tendrán la misión de controlar y asegurar los niveles de seguridad.

El grupo recibió ayer su certificado por parte del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA) y del Colegio de Ingenieros Químicos y Profesionales Afines (Ciqpa).

“Estos nuevos inspectores profesionales tendrán por tarea inspeccionar y acreditar a usuarios que utilizan tanques fijos de gas de gran tamaño para fines industriales y de servicios, como hoteles, fábricas, hospitales, restaurantes y otro tipo de industrias”, explicó René Castro, ministro de Ambiente y Energía (Minae).

Los ingenieros fueron capacitados mediante un esfuerzo conjunto entre el Minae y estos dos colegios, que agrupan a profesionales de distintas ramas de la ingeniería, que brindan de, manera privada, el servicio de inspección y acreditación de los sitios industriales en donde se utiliza el gas.

El ministro Castro dijo que en los próximos seis meses habrán de certificarse todos estos usuarios. Concluido ese período, las empresas distribuidoras de gas no podrán vender a los consumidores tanques fijos que no estén debidamente acreditados.

El Minae exigirá a las envasadoras de gas colocarles código de barras a todo cilindro y sus válvulas.

Mediante este mecanismo se procura llevar un control más preciso del cilindro: el año de fabricación, propietario, vida útil, así como la empresa responsable del último llenado.

Toda esa información será incluida en una gran base de datos, a la cual tendrán acceso las autoridades estatales responsables y las envasadoras.

Al asignar una especie de “número de identidad” al cilindro, será más fácil establecer responsabilidades, en caso de un accidente.