Conductores hacen trampa para pasar revisión técnica

Alteraciones en muflas, llantas y frenos son los trucos más comunes

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Creada la ley, sobran los inventos de quienes intentan franquearla. Sin miedo a ser detectado, al menos, un conductor por día llega a una de las 17 estaciones de Riteve con trampas para pasar la revisión técnica vehicular.

Alteraciones en la mufla, frenos y llantas son los principales trucos que llevan. Otros, recurren a la violencia con perros bravos en el asiento trasero del carro o colocan armas sobre el dash, para amedrantar a los inspectores.

El alto para estos choferes lo hacen los mecánicos que realizan la revisión y, ante la costumbre de recibir estos casos, detectan el fraude y los obligan a repetir la prueba.

“Todos esos trucos son fácilmente detectables por los inspectores, pues ya se conocen las tendencias al fraude. Por mes, alrededor de un 48% de los vehículos pierden la revisión ”, explicó la jefa de prensa de Riteve, Jennifer Hidalgo.

El año pasado, Riteve inspeccionó cerca de 1,1 millones de automotores.

Hay choferes que remarcan los canales de la banda de rodadura de las llantas para manipular el desgaste de los neumáticos.

También entran en lista aquellos que instalan un sistema de palancas con el que sustituyen el freno de mano y hay quienes desconectan el inyector del motor para alterar la emisión de gases.

“Los conductores hacen alteraciones de este tipo, sin tomar en cuenta el riesgo que representa para ellos mismos y para otros conductores, que el carro esté bajo esas condiciones”, agregó Hidalgo.

Sin lograr su cometido, deben ir a los talleres a pagar el arreglo y además la reinspección en Riteve, que para vehículos livianos tiene un costo ¢9.930.

“Lo que la gente no entiende es que sus ‘macgyver’ no van a servir de nada y, más bien, terminan siendo un golpe más duro para el bolsillo”, dijo José Alpízar, mecánico en un taller de Guápiles.

Riesgo. En las estaciones, los inspectores también denuncian situaciones de riesgo personal como fuga de líquidos y conductores que llevan perros bravos que amenazan con morder al evaluador si abre las puertas del vehículo.

“ Se han encontrado carros que vienen con desechos y excrementos de animales, así como situaciones de violencia”, afirmó la vocera Hidalgo.

En la lista de anécdotas de Riteve hay un caso en el que el inspector detectó un extintor vencido en un bus. El chofer reclamó con insultos y roció el contenido del extintor sobre el jefe de línea.

Otros choferes amenazan con armas y hay quienes golpean y quiebran el vidrio de la casetilla donde se entrega el resultado de las fallas de la revisión técnica.

La Junta Directiva del Consejo de Seguridad Vial (Cosevi) aprobó, la semana pasada, un reglamento para evitar este tipo de situaciones y prohibir el ingreso al conductor que porte armas en su vehículo.

“Va a existir una prohibición expresa para quienes porten armas o algún otro elemento que ponga en riesgo la vida de los inspectores, tal y como ocurre en las instituciones públicas”, dijo la viceministra de Transportes, Silvia Bolaños.

Carlos Rivas, director jurídico del Cosevi, aseguró que la normativa regulará el comportamiento de los conductores y autorizará a Riteve a rechazar al que no cumpla reglas básicas de respeto.

“Ese reglamento específico sobre el comportamiento que deben mantener los conductores se aprobó la semana pasada y ya se envió al ministro para que siga el debido proceso. En un mes podría entrar en vigencia”, dijo Rivas.

Otra de las exigencias será la presentación de la licencia.

Entre enero y noviembre del 2013, Riteve logró detectar unos 203.029 vehículos que circulaban con frenos en mal estado, 320. 332 con fallas en la emisión de gases y unos 90.329 que perdieron la prueba por llantas en mal estado.

Mientras que en el 2003, el 71% de los carros perdían la prueba en su primera inspección, el porcentaje bajó a 48%, en el 2013.