Un centenar de vecinos de Cartago aguardan por un cateterismo

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El Hospital Max Peralta de Cartago tiene, al menos, a 100 pacientes en lista de cateterismo cardíaco, informó la directora médica, Krisia Díaz Valverde.

Esa es la cantidad de asegurados quienes califican como pacientes programados o electivos, dijo Díaz, quien aclaró que el hospital cartaginés no tiene servicio de hemodinamia y esos asegurados dependen del Calderón Guardia, en San José.

Los hemodinamistas examinan el estado de los vasos sanguíneos y del corazón, mediante procedimientos invasivos de diagnóstico, como es el caso de los catéteres.

Díaz aseguró que las personas con una situación urgente se resuelven con mayor rapidez en el centro médico josefino, a cuya área de referencia pertenece el Max Peralta.

Según varios documentos en poder de La Nación , grupos comunales, incluida la Junta de Salud del Max Peralta y la Asociación para la Rehabilitación Cardíaca en Cartago (Arcca), han manifestado, desde el 2007, su preocupación por la falta de un servicio de hemodinamia.

En uno de ellos, se habla hasta de 600 pacientes en espera, pero Díaz aseguró que ella nunca ha sido informada de esa cifra.

Ante el riesgo de que en Cartago, como en el Hospital México, fallezcan pacientes en espera de cateterismo, Díaz manifestó que no podía “ni negar ni asegurar” esa posibilidad.

En un documento de setiembre de 2013, dirigido a Díaz, varios cardiólogos del Max Peralta manifiestan su preocupación.

“(...) Se nos es imposible justificar 20 días de internamiento promedio para un estudio, a las instancias administrativas, imposible explicarle a un paciente que ha tenido 2-3 infartos a la espera de 3 años, imposible dar la cara a familiares cuyo pariente muere esperando angiografía.

”Genera gran frustración en el especialista ser partícipe de una atención terapéutica con 50 años de rezago en las posibilidades de prevención de co-morbilidades, curación y rehabilitación del paciente”, agrega el oficio HMP-SC-57-2013.

Este centro médico, expresó Díaz, gestiona una sala híbrida ante las autoridades de la Caja.

La inversión ronda los $1,5 millones y será mientras se construye el nuevo hospital, que tendría servicio de hemodinamia. El inmueble estaría listo hasta después del 2020.