Pese a que cada vez se realizan más cierres de negocios y labores de inspección, la morosidad de los patronos con la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) va en aumento.
Solo entre enero y setiembre de este año, los patronos le adeudaban a la entidad ¢140.087 millones, cifra superior a los ¢128.580 millones que quedaron en mora en el 2012.
El indicador de morosidad –que se refiere a la deuda que se acumula en un año respecto a la facturación del mismo periodo– también da indicios de lo anterior: en el 2011 ese indicador para la Caja quedó en 0,55%; en el 2012 cerró en un 0,66% y en lo que va del 2013 ya se ubicó en un 0,67%.
Aunque la cifra ha ido en aumento, al compararla con la morosidad en los bancos estatales –a modo de ejercicio–, sigue siendo positivo para la Caja pues para la banca pública la morosidad a agosto del 2013 osciló entre un 2,38% y el 2,78%, según datos de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).
Gustavo Picado, gerente financiero de la Caja, dijo que hay varios factores para entender el aumento de la morosidad, entre ellos la labor de inspección para detectar nuevos patronos y generar más gestiones de cobro, o bien el que más empresas dejen de lado su responsabilidad con la institución.
No son pocos. Los ¢140.087 millones que debieron ingresar a las arcas de la Caja en lo que va de este año son adeudados por 64.014 patronos (¢68.654 millones en mora) y 125.548 trabajadores independientes (con ¢71.433 millones).
Ante la entidad hay deudas de deudas. Por ejemplo, en el listado de los mayores morosos aparecen empresas agrícolas, de seguridad, hoteles, cooperativas, constructoras y centros de atención de llamadas telefónicas.
El mayor deudor con la Caja es la firma Customerspeak S.R.L., con un monto de ¢1.573 millones, de acuerdo con información confirmada por la CCSS la tarde de ayer.
De los miles de patronos que están en mora, los primeros 20 conforman el 7,6% del monto total que no percibió la Caja en los primeros nueve meses de este año, según la base de datos del Sistema Centralizado de Recaudación (Sicere).
Con sellos. Luis Diego Calderón Villalobos, jerarca de la Dirección de Cobros de la Caja, indicó que en el primer semestre del año la entidad logró recuperar ¢148.394 millones –cifra similar a la deuda actual– por el trámite de 2.127 cierres de negocios.
En el histórico de ese apartado también se detalla el aumento en la morosidad: para el 2004 se realizaron 719 cierres de locales comerciales para lograr la recuperación de ¢7.541 millones; ocho años después, para el 2012, se concretaron 4.695 cierres por una deuda total de ¢15.173 millones.
A eso se suma la emisión, hace dos meses, de un nuevo reglamento para el cierre de negocios, que permite a la Caja gestionar clausuras de cinco días al término de dos semanas de gestiones, y prorrogarlas por otros cinco.