Más de 1.200 personas acudieron este sábado a una capacitación intensiva de qué hacer y cómo resucitar a alguien que está sufriendo un ataque al corazón. La cifra rebasó las expectativas de los organizadores de la instrucción, la cual se realizó, de manera gratuita, en el Mall San Pedro.
Esta es una de las actividades que se realizaron en el marco del Día Mundial del Corazón y contó con la participación de 50 cruzrojistas y bomberos, quienes brindaron la instrucción a los interesados desde las 9 a. m. hasta las 5 p. m.
El doctor Elliot Garita Jiménez, del Colegio de Médicos de Costa Rica y presidente de la Fundación Internacional del Corazón, aseguró que la jornada fue histórica en referencia a lo que llamó “los minutos más valiosos”, o sea, el momento cuando alguien sufre un colapso cardio-vascular.
“La aceptación de las personas ha sido muy por encima de nuestras expectativas. Y tuvimos la fortuna de tener a los mejores en resucitación, como lo son los colaboradores de Bomberos de Costa Rica y de la Cruz Roja Costarricense”, indicó Garita Jiménez; uno de los organizadores, quien dijo que esperaban a unas 500 personas, no a 1.200 como al final ocurrió.
Alejandra Martínez, una de las asistentes, salió visiblemente entusiasmada de la capacitación por su evidente utilidad ante una emergencia familiar o en plena vía pública. “Estas oportunidades son muy buenas, hay que aprovechar estas oportunidades aunque tengamos que levantarnos temprano un fin de semana porque a uno le llegan”, explicó.
Maniobras básicas
El taller se centró en maniobras básicas de resucitación cardíaca impartidas en grupos de hasta 52 personas, a quienes primero se les presentó un video de la técnica y luego hicieron prácticas guiadas por un instructor, en subequipos de cuatro participantes y un maniquí.
La técnica ‘salva corazones’ se enfoca en el aprendizaje de las compresiones torácicas responsables de mantener la sangre oxigenada circulando hasta cuando se puedan restablecer la respiración y las palpitaciones cardíacas, mientras el paciente pueda tener acceso a una atención médica especializada.
Según la Clínica Mayo, en Estados Unidos, esta técnica permite salvar vidas y resulta muy útil conocerla en situaciones de emergencias, como un ataque cardíaco o un ahogamiento, en las que la respiración o los latidos del corazón de una persona se han detenido.
“La experiencia vivida hoy fue muy enriquecedora y todos deberíamos aprender cómo hacer un masaje cardíaco, por si un día debemos ayudar a alguien de nuestra familia”, declaró María José Pereira, otra de los asistentes.