‘Cuidadores quemados’ reciben terapia grupal para aprender a cuidarse

Cooperativa organiza dos programas semestrales para cuidadores que puedan sufrir agotamiento o desgaste físico y mental en Barva de Heredia

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Cuidar a una persona totalmente dependiente en actividades de la vida diaria, incluida su limpieza y alimentación, es una tarea de amor pero también representa un gran desgaste físico y emocional para quien cuida.

En Barva de Heredia, Coopesiba detectó un incremento muy importante de cuidadores con el conocido síndrome del cuidador quemado. Por eso, el servicio de Trabajo Social de esta cooperativa abrió un proyecto, hace casi siete años, para inculcar hábitos de autocuidado en estas personas.

Bajo el lema “Cuídate para cuidar”, el proyecto inició en el 2018. Desde entonces, han ayudado a cerca de 80 cuidadores, principalmente, mujeres a cargo de personas adultas mayores dependientes, informó la trabajadora social de la cooperativa, Catalina Saborío.

El incremento en la cantidad de población mayor de 65 años y, en especial, de personas con dependencia generada por situaciones de salud como derrames cerebrales, alzhéimer y otras demencias asociadas, impulsó al área de Trabajo Social de Coopesiba a desarrollar estas terapias grupales.

Coopesiba es una de las cooperativas que venden servicios de atención primaria en salud a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) en Barva y San Pablo de Heredia.

Para tener acceso a estas terapias, las cuidadoras —mujeres, en su mayoría— son referidas por el médico desde la consulta externa, después de recibir el diagnóstico del síndrome de cuidador quemado. Luego pasan por una entrevista con Trabajo Social para ingresar al grupo.

Se realizan dos cursos por año, uno en cada semestre. Son ocho sesiones presenciales, una por semana, explicó Saborío. El primer grupo de este año arranca el jueves 4 de julio, en horario de 1 p. m. a 4 p. m..

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¿Cuáles son los síntomas del cuidador quemado?

La sintomatología asociada a la labor del cuido y que forma parte del síndrome del cuidador quemado incluye, entre otros, falta de energía, cansancio, preocupación continua, insomnio, cambios en el apetito y peso, y dolor corporal.

Se le asocia, además, con irritabilidad y cambios frecuentes de humor, altos niveles de ansiedad y depresión, y apatía por la vida.

Según Saborío, no se trata solo de desgaste físico y emocional. Este síndrome también está relacionado con todo lo que rodea el proceso de cuido; principalmente, el escaso apoyo de la red familiar, comunal e institucional.

La situación se ha complicado en los últimos años. Mucho se debe a la pérdida de apoyo estatal para las redes de cuido, incluidos los centros diurnos para personas adultas mayores.

“Esto genera mayor presión en las familias y, sobre todo, en una sola persona, la cuidadora, que tiene que buscar apoyo de familiares, incluso recurriendo a la vía legal, para atender las necesidades del adulto mayor”, explicó Saborío.

La terapia grupal busca dar herramientas a los cuidadores sobre cómo manejar todas las situaciones relacionadas con su labor de cuido. Ojo: no es enseñarlos a cuidar, sino más bien darles un espacio para aprender sobre autocuidado, en donde el cuidador entienda y pueda identificar cuándo está quemado y qué tiene que hacer.

Estos espacios permiten tejer una red interna entre los cuidadores. Se identifican entre ellos, comparten estrategias y se pueden organizar actividades de autocuidado. Resultan ser espacios de mucho crecimiento personal, dijo Catalina Saborío.

Para participar en estos grupos hay que vivir en Barva y pertenecer al área de referencia de Coopesiba. También es requisito estar asegurado.

Entre los contenidos que se desarrollarán está el conocer el síndrome del cuidador quemado, aprender a identificar los síntomas, saber qué es el autocuidado y qué puede hacer para su propio cuidado.

También se realizan sesiones para controlar el estrés y las emociones, la inteligencia emocional, y el manejo de conflictos y comunicación asertiva para mejorar las relaciones y la comunicación con la familia.

Si usted vive en Barva o San Pablo de Heredia y está interesado en acudir a estas terapias grupales como parte del proyecto “Cuídate para cuidar” puede escribir al siguiente correo: csaborio@coopesiba.cr. También puede acudir directamente a la sede de Coopesiba.