La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) reporta menos personas hospitalizadas por infecciones respiratorias agudas graves (IRAG): 47 estaban internadas en cuatro hospitales, según datos al 2 de enero anterior.
Esa cantidad representa 22 personas menos que al final del 2015.
De las personas que se encuentran hospitalizadas, diez están en una Unidad de Cuidado Intensivo (UCI), informó la Caja en un comunicado de prensa, que no detalla la cantidad de pacientes, ni el hospital donde se encuentran internados.
La información la facilitó Xiomara Badilla Vargas, jefa de la Subárea de Vigilancia Epidemiológica de la institución, quien dijo que "el número de hospitalizaciones por IRAG no tuvo mayor variación".
Según la CCSS, 9 personas han fallecido en sus hospitales y dos en centros privados.
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El Ministro de Salud, Fernando Llorca, confirmó a este medio, el lunes, que esa dependencia lleva contabilizadas 11 muertes por virus respiratorios, principalmente, el virus influenza AH1N1.
Según informó la Caja, la institución gestionó desde el año pasado la compra por $3 millones de las vacunas contra la influenza que se aplicarán a población de riesgo en la jornada nacional de abril próximo.
Se espera que 950.000 vacunas ingresen en marzo. Son 200.000 dosis más que las aplicadas en el 2015, informó la Caja.
"Esta es una acción preventiva que se realiza cada año e implica una inversión importante en financiamiento, recurso humano y otros recursos institucionales, con el fin de proteger a la población de algunos de los virus de influenza A, incluyendo AH1N1", dijo Sáenz Madrigal en el comunicado.
Tanto el Ministerio de Salud como la CCSS informaron de que la mayoría de las personas que han fallecido en este pico tardío de infecciones respiratorias, no tenía la vacuna contra la influenza que se puso en la campaña del 2015.
La dosis que aplica la CCSS incluye la protección contra el virus AH1N1, que este año ha mostrado mayor virulencia (agresividad).
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También se ha encontrado que gran parte del personal de salud no se puso esta vacuna. Solo en el Hospital de San Carlos, epicentro del actual pico respiratorio, el 70% del personal no se vacunó contra la influenza el año pasado.
Las vacunas que se pongan las personas ahora no los protegerán contra los virus que están circulando en estos días, pues la inmunidad tarda varios meses en crearse. La protección será para virus que circulen a mediados de año.
La única protección provendrá de las medidas preventivas que están recomendando las autoridades de Salud: lavado de manos, protocolo de estornudo y tosido, no acudir a sitios públicos si se está resfriado y, a los grupos de riesgo, abstenerse de acudir a lugares de concentraciones masivas para evitar el contagio.
Este pico respiratorio se esperaba para agosto o setiembre pero se desencadenó en diciembre, por lo que se considera tardío.
Las autoridades de Salud aún no hablan ni de brote ni de epidemia.