La Vieja Metrópoli avanza en el camino de convertirse en la primera ciudad de Costa Rica donde sus habitantes sean compasivos con sus vecinos más enfermos y con dificultades económicas, sobre todo los adultos mayores más vulnerables.
Cartago ha sumado un nuevo aliado en esa dirección, siete meses después de iniciar un recorrido cuyo destino final es también hacer de Costa Rica una de las primeras naciones en el mundo que sea compasiva con sus enfermos terminales.
La Asociación Caminemos Juntos Cuidados Paliativos de Cartago (Ascaju) se convirtió en un socio estratégico del proyecto Cartago con vos. Ciudad Compasiva, que se construye con la guía de la Fundación Partir con Dignidad y el apoyo de Coopenae.
Sí, el proyecto es ambicioso pero ¿quién dijo miedo? En octubre del 2022 y en el marco del Día Internacional de Cuidados Paliativos, la Municipalidad de Cartago se comprometió con ese desafío, que hoy fortalece su músculo con el aporte de Ascaju, organización que celebra su 30 aniversario.
Esta Asociación es sin fines de lucro. Hace tres décadas asumió la causa del cuidado paliativo y la lucha por el bienestar de los cartagineses con enfermedades con dolor crónico de difícil manejo o terminales, sobre todo quienes están en situación social y económica vulnerable.
“Estos agentes contribuyen con las acciones de formación, sensibilización, concienciación y empoderamiento de la sociedad. Ponen a disposición sus recursos para construir y desarrollar una comunidad organizada para la atención de las personas al final de sus vidas”, dijo Randall Otárola, director ejecutivo de la Fundación Partir con Dignidad.
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Hay otras organizaciones involucradas en este proyecto. Entre ellas, el Ministerio de Salud y varios grupos de la sociedad civil.
La participación de Ascaju en Cartago con vos permite a la Asociación conectarse con un movimiento internacional que promueve la participación comunitaria en la atención de personas enfermas al final de sus vidas, destacó Ligia Trejos, su directora ejecutiva.
Esto es especialmente importante como apoyo a las familias de estos pacientes, y sobre todo a quienes los cuidan, muchas veces en soledad y con un mar de dificultades, destacó Trejos.
Es posible ser compasivo
El movimiento de ciudades compasivas es promovido desde Sevilla, España, por la Fundación New Health. En América Latina existen experiencias en Argentina, Colombia, Brasil y Costa Rica.
El proyecto cartaginés busca construir las bases para convertir a Costa Rica en el primer país compasivo del mundo. El cantón Central de Cartago cumple varias condiciones para convertirse en ese gran laboratorio donde se pueda ensayar esa experiencia.
Entre otras características, Cartago está entre los cinco cantones con mayores necesidades de cuidados paliativos, de acuerdo con el estudio Necesidades de cuidado paliativo en Costa Rica, de Ernesto Picado, Flavia Solórzano y Manuel Suárez.
Cartago tiene, además, una red de cuidados paliativos muy comprometida. Está Ascaju, el Programa Municipal para la Persona Adulta Mayor y 18 centros diurnos que atienden a unas 700 personas mayores.
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En el Hospital Max Peralta se atiende a esta población con programas al paciente oncológico, con enfermedad crónica en fase terminal y dolor crónico.
Un diagnóstico elaborado para este proyecto indica que el 10,4% de la población del cantón Central de Cartago tiene más de 65 años. Hasta un 34,3% posee algún tipo de discapacidad.
El porcentaje de habitantes con necesidades de cuidados en el cantón de Cartago es del 7% y el número de personas susceptibles de cuidados es de 662 habitantes.
En ese contexto, ¿qué significa una ciudad compasiva con los adultos mayores? La meta es ambiciosa: conseguir que cada persona con enfermedad avanzada, alta dependencia o que está al final de su vida, reciba atención integral, compasiva y de calidad.
“Cartago compasivo es el inicio de un proyecto que busca inspirar lo mejor del ser humano, su humanidad. Busca dar luz a seres luchadores y a sus familias que, día tras día, practican de forma sincera y desprendida el arte de cuidar.
“Buscamos que toda la comunidad se una con amor y sin miedo a la muerte alrededor de cada familia y ofrezca su ayuda y acompañe a sus vecinos”, dijo Ernesto Picado Ovares, fundador de Partir con Dignidad.