El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) estudia una denuncia contra el comediante mexicano Adal Ramones y otra contra dos funcionarios del Congreso.
En el caso de Ramones, se trata de una queja por supuesta intromisión de un extranjero en la política nacional, pues el cómico aludió al candidato presidencial del Partido Liberación Nacional (PLN), Johnny Araya, en una reciente presentación de sus monólogos.
En cuanto a los empleados del Congreso, la acusación es en contra del subdirector del Departamento de Servicios Médicos, de apellido Rodríguez, y una enfermera de apellido Fernández.
Ambos participaron el viernes 11 de octubre en una gira de la campaña Caravanas de la Salud, que realiza la esposa de Araya, la dentista Sandra León.
La Nación intentó conversar con Juan Carlos Campos, productor del espectáculo de Ramones y esposo de la hija de León (por lo tanto hijastra de Araya), pero fue imposible contactar al empresario. El show fue el sábado 28 de setiembre en el Palacio de los Deportes.
La frase de Ramones que provocó el reclamo fue “¡Pinche, Johnny! Por lo menos, mi voto no”. También dijo que jamás le daría su voto a Araya “ni para presidente de la clase en la escuela”.
El ciudadano que presentó la denuncia alega que se violentó el artículo 19 de la Constitución, que impide a los extranjeros intervenir en los asuntos políticos del país.
Andréi Cambronero, letrado del TSE, explicó que el caso se recibió el 10 de octubre y está en estudio de la Inspección Electoral.
Beligerancia. La participación en las Caravanas del subdirector de Servicios Médicos del Congreso y la enfermera no solo es analizada por el TSE, sino además en el Poder Legislativo.
La diputada del Partido Acción Ciudadana (PAC), Yolanda Acuña, presentó la queja al órgano electoral y pidió que se determine si los empleados incurrieron en beligerancia política.
El director ejecutivo de la Asamblea, Antonio Ayales, dijo que se abrió un proceso para establecer si hubo faltas administrativas.
Ayales pidió información a Recursos Humanos con el fin de determinar si hubo transgresión a la prohibición que rige para funcionarios públicos.
Consultados por La Nación , Rodríguez y Fernández aceptaron que estuvieron en la feria de salud y que usaron el uniforme verde con el logotipo de la campaña de Araya.
El subdirector afirmó que, por su vocación médica, siempre participa en este tipo de eventos. Añadió que es militante del PLN hace años.
Por su parte, Fernández señaló que fue un error utilizar esos uniformes y explicó que solo fue para ayudar a personas con sus servicios médicos gratuitos.