La Comisión Política del Partido Acción Ciudadana (PAC) decidió no llevar a su presidenta interina, Kattia Martin, al Tribunal de Ética de la agrupación por el caso de su reciente nombramiento en la Asamblea Legislativa.
La cúpula del partido gobernante concluyó que la designación de Martin en esa plaza fue transparente y a derecho.
Una polémica surgió en octubre pasado al trascender que el Directorio legislativo le había asignado a Martin la plaza de un chofer que se pensionó. Así pudo colocarla como profesional 2B (cargo más alto entre los asesores) en el departamento de Prensa y Protocolo, tras una revalorización salarial. Antes, ella tenía un puesto de confianza en la fracción del PAC.
Según Gabriela Saborío, secretaria general de Acción Ciudadana, las dudas se despejaron después de escuchar, el 10 de diciembre anterior, las explicaciones del presidente del Congreso, Henry Mora, y la versión de la propia Martin.
“Salimos satisfechos porque corroboramos que fue un proceso claro y transparente. Doña Kattia tiene un currículo muy impresionante y, a juicio de don Henry, ella puede aportar en la Asamblea mucho en la parte de comunicación y, sobre todo, de protocolo, porque ella habla varios idiomas”, expresó Saborío.
Aunque el departamento de Recursos Humanos y la directora de Prensa y Protocolo del Congreso, Karla Granados, cuestionaron la decisión, Mora la defendió, incluso después de que Martin tuvo que irse a trabajar desde la casa por no tener equipo asignado ni espacio disponible.
En su intervención, Mora presentó un pronunciamiento de la Dirección General de Servicio Civil (DGSC), firmado por su director, Hernán Alberto Rojas, en el que se avaló la designación de Martin al señalar que no era necesario un concurso por ser un nombramiento interino.
Pesquisas. Las opiniones sobre la decisión de nombrar a Martin en esa plaza arrancaron el pasado 28 de octubre a pedido del fundador y actual diputado del PAC, Ottón Solís.
El rojiamarillo pidió a la Comisión Política determinar si Mora y Martin violentaron los principios éticos de la agrupación.
Al respecto, Saborío aseguró que enviaron una nota a Solís informándole de que no se pronunciarán sobre el actuar ético de sus militantes porque eso solo le compete al Tribunal de Ética.
“La Comisión no tiene esa potestad, no le corresponde estar viendo quién actuó o no de forma ética. Si don Ottón siente necesario llevarlos al tribunal, que presente la denuncia, pero ante ese órgano interno, no ante la Comisión Política”, agregó Saborío.
Solís dijo sentirse sorprendido por la decisión de la cúpula del PAC. A su criterio, son las máximas autoridades del partido las encargadas de velar por el cumpliendo de los principios éticos.
“Sorprendido: solo puedo decir eso. En todo caso, ya presenté otra denuncia ante el Tribunal de Ética”, afirmó Solís.
Por su nombramiento, además del proceso en el PAC, Mora y Martin afrontan otra querella como sospechosos del delito de peculado en el Ministerio Público tras una denuncia anónima.