El Frente Amplio y el PAC son los partidos que más apoyo han dado para aprobar reformas legales en la Asamblea Legislativa durante el último año, y los que más yuntas han formado a la hora de votar. Sin embargo, no habrían logrado convertir en ley la mayoría de estos proyectos de no ser por el PLN, aunque esta agrupación los haya respaldado en menor medida.
El PUSC y el Libertario, en cambio, son claramente los partidos políticos más disidentes en estas votaciones.
Así se desprende de un análisis de 25 proyectos aprobados desde el 18 de julio, cuando se implementó el sistema de voto electrónico, el cual permite registrar la forma exacta en que votó cada partido.
Con base en los votos emitidos, este medio estimó el apoyo porcentual que cada partido otorgó a cada iniciativa legal respecto de la composición total de sus bancadas.
Se tomó en cuenta la aprobación en primer debate de las 25 reformas legales más importantes. No se incluyen, por ejemplo, proyectos sobre asuntos municipales que pasan por el Congreso.
A la hora de calcular qué porcentaje de sus diputados votaron a favor del conjunto de los 25 proyectos, el FA aparece de primero con un 85% de apoyo. Le sigue el Partido Acción Ciudadana (PAC) con un 81% y Liberación Nacional (PLN), con un 74% de sus legisladores.
La Unidad Social Cristiana (PUSC) se distancia, con un 60,5% de respaldo a estas iniciativas, y el Libertario solo concedió el 47% de sus votos.
Sin embargo, esa es una visión general.
A la hora de observar las votaciones proyecto por proyecto, sobresale que el FA y el PAC lideraron la aprobación de siete de las 25 iniciativas, al ser las fracciones que más apoyo concedieron.
BASE DE DATOS DE LAS VOTACIONES LA ASAMBLEA
Así ocurrió, por ejemplo, en los planes para financiar áreas silvestres mediante un aumento de ¢1.000 en el marchamo, para imponer regulaciones antilavado a joyerías, contadores y abogados; para exigir paridad entre hombres y mujeres en todas las elecciones, y para perdonar deudas a los beneficiarios del Inder.
En estos casos, el FA se presenta como un bloque sólido en el que, a menudo, el 100% de sus diputados vota a favor, seguido por el partido de Gobierno. Casi siempre que a los frenteamplistas se les escapa uno o más votos de la línea de fracción, en parte se debe a la oposición de su diputada Ligia Fallas.
No obstante, el apoyo de estos dos no era suficiente para aprobar esta agenda, pues el FA tiene nueve diputados y el PAC 13. Entonces, en la mayoría de los casos, completaron los votos requeridos con el apoyo de Liberación Nacional, aunque este partido conceda, porcentualmente, menos votos. La ventaja es que el PLN tiene la bancada más grande, con 18 diputados.
Por ejemplo, al FA y al PAC no les habría sido posible subir en ¢1.000 el marchamo, ante la oposición del PUSC y del Libertario, si no es porque el PLN concedió poco menos del 70% de sus votos, con lo que los tres grupos hicieron mayoría.
Lo mismo ocurrió con el perdón a los deudores del Instituto de Desarrollo Rural (Inder), en donde socialcristianos y libertarios opusieron resistencia.
La dupla PLN-PAC
Después de la mancuerna FA-PAC, la segunda más común es PAC-PLN, que se alió en seis casos para aprobar proyectos como el impuesto a las personas jurídicas, la Ley contra el maltrato animal y la reforma a la Ley de Tránsito, que elevó las multas por excesos de gases y de sonido.
Al igual que Liberación reforzaba la primera dupla, en este caso es el Frente Amplio el que aporta votos para lograr mayorías.
Por ejemplo, en el caso de la aprobación del préstamo para construir los hospitales de Cartago, Turrialba, Limón y Puntarenas, el PLN fue el que puso la mayor parte de su fracción para aprobar el proyecto, en dupla con el PAC. El FA apareció como un tercer respaldo.
Coincidencias FA-PLN
Hay un tercer bloque: FA-PLN, que encabezó cinco votaciones como la reforma a la Ley de Expropiaciones y la ratificación de Costa Rica al Acuerdo de París para atenuar el cambio climático.
También, lo hicieron con la Ley para perfeccionar la rendición de cuentas y el proyecto para construir la autopista a Cartago mediante un fideicomiso. El PAC ha sido el complemento.
Esa dupla también sirvió para encabezar el primer debate al Segundo Presupuesto Extraordinario del 2016 y la reforma a la Ley de Expropiaciones, aprobada recientemente.
¿Por qué el PUSC y el ML apoyan menos?
El Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) ha sido más disidente en estos 25 proyectos que el FA, el PAC y el PLN, y esto se debe tanto a que no concordaban con los proyectos como a que se ausentan más a la hora de votar. En síntesis, es más regejo a aportar sus votos positivos para dichas .
El Movimiento Libertario es en realidad el que lidera los índices de votación negativa en el Congreso, pues ha sido el partido que más veces ha votado en contra de las propuestas discutidas, ya fuesen planes del Poder Ejecutivo, del PAC, del PLN o de otras agrupaciones. No obstante, solo tiene tres diputados, por lo que el hecho de que dos voten en contra y uno a favor, ya implica un apoyo de solo un 33%.
Otras uniones partidarias
Del análisis realizado por La Nación, también se encontró que, en tres ocasiones, han sido el Frente Amplio y el PUSC los que dieron la mayoría de sus votos para que los proyectos en discusión se aprobaran: la primera votación de la reforma a la Ley de Tránsito, el préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para mejorar las aduanas y el límite al gasto estatal en elecciones.
Finalmente, para la votación del plan para mejorar la lucha contra el fraude fiscal, fueron el PUSC, el PAC y el PLN, en ese orden, quienes aportaron la mayor cantidad de votos. Igualmente se unieron estas tres agrupaciones para sellar la votación de la ley que prohíbe a jerarcas del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) participar en política.
Óscar López, el ausente en las votaciones
De los partidos minoritarios, el que menos apoyo ha dado para aprobar los 25 proyectos más importantes del último año es Óscar López, de Accesibilidad Sin Exclusión (PASE), con solo un 16% de respaldo a las iniciativas legales.
En la otra cara de la moneda, está Alianza Demócrata Cristiana (ADC), del diputado Mario Redondo. Él respadó un 88% de las iniciativas. Le sigue la bancada de Renovación Costarricense, con un 46%.
La falta de apoyo de López se debe a que estuvo ausente en la mayoría de las votaciones en primer debate de estos proyectos.
El análisis de las votaciones no solo cuenta votos a favor y en contra, sino que también ausencias, lo que también puede demostrar voluntad política.
Óscar López estuvo ausente en el 84% de estos primeros debates. Le siguió la bancada del evangélico Renovación Costarricense, con un 46%.
En cambio, el Frente Amplio tuvo un ausentismo de solo un 9,7% y Mario Redondo, de un 12%.