Cinco diputados del bloque fabricista Nueva República intentaron traerse abajo un artículo, dentro del proyecto de regulación de huelgas, que prohibiría a los huelguistas dedicarse a actividades personales, como viajar o hacer mandados, durante el movimiento.

Dicha disposición se mantuvo en el texto pese a la moción de los fabricistas, pues esta fue rechazada la noche del lunes.

“Queda prohibido a los trabajadores que participan de la huelga ausentarse o separarse injustificadamente para realizar actividades personales o familiares ajenas a los fines que persigue dicho movimiento”, dice el párrafo que se agregaría al artículo 373 del Código de Trabajo.

La moción en contra de esa disposición la firmaron los legisladores Carmen Chan, Harllan Hoepelman, Ignacio Alpízar, Nidia Céspedes y Marulin Azofeifa.

La palabra “injustificadamente” la añadieron los legisladores ese mismo día, al aprobar una moción de la socialcristiana Shirley Díaz.

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Este medio procuró consultar a Carmen Chan, coordinadora de Nueva República, por qué el bloque consideró necesario que la prohibición se eliminara, sin embargo, su encargada de prensa dijo que la diputada no tuvo tiempo para otorgar la entrevista.

De acuerdo con el diputado liberacionista Carlos Ricardo Benavides, presidente legislativo y proponente del proyecto de ley, el trabajador que vaya a huelga no tiene por qué ausentarse para realizar cualquier actividad que no tenga relación con su protesta.

“Viajar, ir a hacer mandados, a cortarse el pelo, a visitar un pariente”, enumeró el legislador, a modo de ejemplo.

La reforma que impulsa Benavides también establece que, una vez que termine la huelga, el patrono del trabajador que se haya marchado a realizar actividades personales tendrá un mes para iniciar el procedimiento de sanción o despido correspondiente.

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Huelga no da vía libre para uso del tiempo

El abogado Ronald Gutiérrez, socio de la firma BDS, afirmó que la redacción vigente del Código de Trabajo ya da a entender que los días de huelga no son un tiempo que los trabajadores pueden usar a su antojo.

Gutiérrez parte de que el artículo 371 del Código define la huelga como una suspensión concertada de labores. Es decir, que fue acordada por un grupo de personas, con objetivos determinados.

“Si la base sindical a la cual estoy afiliado determina que vamos a ir a ejercer el derecho de huelga en una manifestación de tal lado a tal lado, debería estar apoyando esa manifestación. Estar en huelga no implica solo la suspensión de labores y cada uno por su lado”, afirmó.

No obstante, según el abogado, por el momento tal disposición no está regulada expresamente, por lo que la reforma que se tramita en el Congreso y, específicamente, el nuevo párrafo que los fabricistas procuraron eliminar, traería seguridad jurídica.

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La falta que plantea el abogado es precisamente la que detectó el año pasado el Ministerio de Educación Pública (MEP), luego de que 556 de sus funcionarios se fueran al exterior durante la huelga de maestros.

En un comunicado que divulgó el martes, Chan afirmó que las huelgas deben regularse en un punto medio, con una ley “justa, equilibrada y proporcional”, y afirmó que procura garantizar el derecho a la protesta y a la vez la prestación de servicios a la población.

Los independientes de Nueva República presentaron varias mociones para eliminar distintos artículos del proyecto de ley, como el que dicta la forma en que se harían cobros retroactivos del salario a quienes participen de huelgas ilegales y los que definen los servicios esenciales y trascendentales del Estado.