EE. UU. advierte a Costa Rica incomodidad de invertir en países con tecnología de China

Nathaniel Fick y Anne Neuberger, altos funcionarios del Gobierno de EE. UU., afirman que las empresas se incomodan si los servicios de telecomunicaciones de un país provienen de China

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Dos altos funcionarios del Gobierno de Estados Unidos advirtieron a Costa Rica de que las compañías están cada vez más incómodas de hacer grandes inversiones en países con infraestructura de telecomunicaciones proveniente de China o brindada por empresas originarias del país asiático, por considerar que estas no son de confianza y constituyen un riesgo para la privacidad.

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Así lo manifestaron los funcionarios Nathaniel Fick y Anne Neuberger, representantes de la administración del presidente Joe Biden, durante una visita oficial a Costa Rica.

Fick se desempeña como embajador de la oficina de Ciberespacio y Política Digital de los Estados Unidos, mientras que Anne Neuberger es la asesora adjunta de Seguridad Nacional para Tecnología Cibernética y Emergente en el Consejo de Seguridad Nacional de EE. UU.

La Nación consultó a ambos si consideran posible que, en Costa Rica, coexistan inversiones chinas y estadounidenses en infraestructura de telecomunicaciones, o si será necesario escoger entre ambos socios. El gobierno del presidente Rodrigo Chaves emitió un decreto que impide a empresas provenientes de China convertirse en proveedores de redes y soluciones de tecnología 5G en territorio costarricense, debido a que el gigante asiático no está suscrito al Convenio de Budapest sobre ciberdelincuencia, lo que deja por fuera a la empresa Huawei. No obstante, en febrero pasado, el Tribunal Contencioso Administrativo suspendió la ejecución del decreto.

El embajador Fick respondió que las compañías a cargo de desarrollar las tecnologías más vanguardistas se sienten “incómodas de hacer grandes inversiones sobre infraestructura que no es confiable”.

Dijo que se refería a empresas dedicadas a solventar los problemas más complejos de la sociedad, en áreas como salud, educación y agricultura. En su criterio, este tipo de firmas están asociadas cada vez más a EE. UU.

“El gobierno de Estados Unidos no está pidiendo a nadie que tome una decisión. En realidad, nos corresponde a nosotros, es nuestra responsabilidad, articular una alternativa que otros gobiernos y otras personas encuentren atractiva y que quieran elegir por su propia cuenta.

“Entonces, no se trata de forzar una elección, sino de articular una visión de lo que puede ser un futuro tecnológico compartido”, agregó.

Neuberger alega riesgo para privacidad con empresas chinas

Por su parte, la asesora Anne Neuberger aseguró que existe una cercana relación entre el gobierno de China y las empresas provenientes de ese país, así como una participación de funcionarios en los órganos de las empresas que deciden el acceso a datos, en cualquier momento, de cualquier red que las compañías chinas estén manejando en cualquier lugar del mundo.

“Hay riesgos reales para las comunicaciones de los costarricenses en las redes y para cualquier compañía que tenga propiedad intelectual sensible corriendo por esa red, porque también sabemos que el Gobierno chino usa los servicios de telecomunicaciones, en algunos casos, para obtener información que beneficie a compañías chinas que tal vez estén ofertando contra otras compañías en el resto del mundo”, advirtió la asesora norteamericana.

Posición sobre el Convenio de Budapest

En cuanto a la inclusión del Convenio de Budapest en el decreto ejecutivo costarricense, Fick dijo que este un asunto propio de Costa Rica.

Empero, agregó que el Convenio de Budapest es uno de los instrumentos que se pueden utilizar para evaluar el cumplimiento de un país o de un proveedor en cuanto al comportamiento responsable en el ciberespacio.

“La decisión de cómo hacer eso es una decisión que debe hacer el Gobierno de Costa Rica”, concluyó el embajador.

La Embajada de China en Costa Rica ha expresado su rechazo al decreto ejecutivo al considerar que viola acuerdos firmados entre ambos países, como el Tratado de Libre Comercio y el Acuerdo de Promoción y Protección de Inversiones.

Igualmente, sostiene que se perjudican los intereses de China y se “afecta gravemente la confianza de las empresas chinas en el clima de negocios y la certeza jurídica de Costa Rica”.

“Si hoy la parte costarricense excluye las empresas chinas de telecomunicaciones por razones de seguridad nacional, mañana puede alegar razones similares para excluir empresas chinas de otros sectores”, había expresado la delegación asiática.

La conectividad es la raíz de la economía

Sobre la importancia de las redes de telecomunicaciones, Neuberger destacó que todo depende de estas. “La conectividad es la raíz actual de la economía”, agregó.

“Garantizar que esa conectividad sea segura es importante en términos de atraer inversiones, porque las compañías quieren saber que sus inversiones van a estar protegidas, así como su propiedad intelectual”, explicó.

La asesora norteamericana también hizo referencia a manifestaciones del presidente Rodrigo Chaves, sobre su interés de que Costa Rica se convierta en un centro regional atractivo para inversiones en semiconductores y para la instalación de más empresas como Intel, la compañía fabricante de microprocesadores y soluciones tecnológicas.

Indicó que gran parte de que eso sea posible depende de que las compañías de capital estadounidense sientan que, al realizar inversiones, cuentan con redes seguras y confiables, que permitan proteger sus innovaciones e inversiones.