Aumento salarial del Gobierno cuesta ¢62.000 millones al año

Incremento supera el costo anual de las becas para los pobres del Fonabe

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El primer incremento salarial decretado por este Gobierno para los empleados públicos tendrá un costo anual de ¢62.570 millones, más de lo que invierte el Estado en becas para estudiantes pobres por medio del Fonabe.

La cifra supera en ¢12.000 millones los presupuestos de instituciones como el Fondo Nacional de Becas (Fonabe) y la Municipalidad de San José, al tiempo que iguala el del Consejo Nacional de Producción (CNP).

El 31 de julio, la administración Solís acordó con los sindicatos subir en un 4% los salarios de los empleados públicos en general, para el segundo semestre de este año, y en un 5,14% los de quienes ganan menos de ¢381.000 (salario mínimo en el Gobierno).

Si bien el aumento para la mayoría de los funcionarios se acerca a la inflación de los primeros seis meses del año (4,14%), este fue mayor que el decretado para los empleados del sector privado, el cual fue de un 2,35%.

Adicionalmente, el ajuste para los burócratas tiene un efecto multiplicador sobre los incentivos salariales que estos reciben, como la dedicación exclusiva y las anualidades.

Ante una consulta de este medio, el Ministerio de Hacienda informó de que el costo total del incremento, calculado para un período de 12 meses, es de casi ¢63.000 millones.

Para el primer semestre de este año, el Gobierno anterior aplicó un incremento de 0,43% a los funcionarios públicos con el argumento de que las finanzas del Estado no soportaban un ajuste mayor, lo cual provocó protestas de parte de grupos sindicales.

A la hora de discutir el incremento del segundo semestre, la administración de Luis Guillermo Solís argumentó que el erario dispone de suficiente dinero para asumir el costo adicional en la planilla de 128.000 empleados.

Por otra parte, Zapote concedió un incremento presupuestario de ¢51.000 millones a las universidades públicas para el 2015.

La suma de los aumentos para salarios y universidades, ¢113.000 millones, equivale a una tercera parte de lo que el gobierno de Laura Chinchilla quería recaudar con la reforma fiscal que impulsó en el 2012, a fin de proveer más recursos al Estado, sin que esta resultase exitosa (fue frenada por la Sala IV luego de pasar el primer debate en la Asamblea Legislativa).

10% más en 2015. El Ministerio de Hacienda aumentó en un 10% la previsión de dinero para cubrir los salarios del sector público en el 2015. Entre el año pasado y el actual, había crecido un 15%.

El aumento incluye el costo del primer ajuste salarial aprobado por este Gobierno y los que podría decretar en el primero y segundo semestres del 2015. Se previó un 4% para todo el año siguiente, concordante con la meta de inflación.

Así lo hizo en un Presupuesto Nacional que crecerá cinco veces más que la inflación y con el que el déficit fiscal ya alcanza un 6,7% del producto interno bruto (PIB), presionando la economía.

El rubro de remuneraciones salariales crecerá en ¢207.000 millones (al pasar de unos ¢2.081.000 millones a cerca de ¢2.291.000 millones).

En ese cálculo también juegan variables como el congelamiento de plazas y la sustitución de personal que se pensiona, lo que más bien puede atenuar los gastos.