La empresa APM Terminals, concesionaria de la nueva Terminal de Contenedores en Moín (Limón), recibió 3.900 solicitudes de trabajo en los últimos 39 días hábiles.
Los datos fueron suministrados por Rogelio Douglas, uno de los voceros de la firma.
En promedio, desde el 12 de enero la compañía recogió 100 hojas de vida por día hábil.
Douglas explicó que la recepción de formularios se intensificó luego del 11 de enero. Ese día, La Nación publicó que los trabajos se iniciarían el 19 de enero.
El representante afirmó que, en ocasiones, la fila para completar peticiones de trabajo tuvo más de 100 metros de largo.
Toda la base de datos de los oferentes fue remitida a la empresa Van Oord-BAM, contratada por el concesionario.
Para los primeros seis meses de labores, la constructora contratará a 350 personas, número que se duplicaría a finales de este año. Al cabo de dos años, serán 1.000 empleados.
Los obreros tendrán la tarea de levantar una plataforma de casi 80 hectáreas sobre el mar.
Este diario insistió en conocer la cantidad de personas contratadas hasta ahora, pero se nos dijo que esa cifra solo la maneja la empresa Van Oord-BAM.
En enero, APM Terminals señaló que buscaba operadores de equipo de construcción, soldadores, maestros de obra, fierreros, peones, bandereros, cargadores y amarradores, entre otros.
Paul Gallie, gerente general de la concesionaria, expresó que la afluencia de gente a sus oficinas demuestra el afán de los limonenses por conseguir empleo.
“Creo que la generación de trabajo es sumamente importante para Limón, y el muelle es una parte importante para dar confianza a otros inversionistas para invertir aquí”, dijo Gallie.
Además, el megapuerto ofrecerá entre 300 y 400 empleos directos cuando entre en operación.
El Consejo Nacional de Concesiones dio la explotación portuaria a los holandeses por 33 años.
La inversión total en el muelle sería de $1.000 millones.
En la actualidad, la transnacional apura la construcción de un campamento que albergará a los trabajadores del proyecto.
Indirectos. Hay cientos de limonenses conscientes de que no les será posible conseguir un campo fijo en la planilla de la firma constructora del puerto en Moín.
Emos Davis, de la Comunidad Portuaria del Caribe (Comport), comentó que trabajan con ese sector de la población.
“Hay gente que está esperando que le den trabajo; nosotros lo que estamos esperando es que la gente se empodere del espacio y empiece a generar sus soluciones de empleo”.
Guillermo Rodríguez, presidente de la Agencia para el Desarrollo de Limón, reconoció que la provincia no está del todo preparada para el inicio del proyecto.
“Ninguna región se puede preparar al 100% para una cosa de estas; se hizo un buen esfuerzo, pero siempre atrasaba el arranque de la obra”, dijo Rodríguez.