68 personas y dos perros componen el equipo que Costa Rica puso a disposición de México para ayudar a atender la emergencia que ocasionó el terremoto de este martes en ese país.
El Grupo de Búsqueda y Rescate Urbano de Costa Rica (G-USAR CRC, por sus siglas en inglés) está reunido en el antiguo edificio de Plaza Traube, en barrio Tournón, listo para abordar un avión que los lleve a localizar sobrevivientes.
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Se trata de miembros del Cuerpo de Bomberos, la Cruz Roja, el Servicio de Vigilancia Aérea y la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), quienes viajarían con casi seis toneladas de equipo para campamento y rescate.
"En esas primeras horas posteriores a la ocurrencia de un sismo nosotros podemos movilizarnos a un país de la región y tener una autosuficiencia de 10 a 12 días", explicó William Hernández, líder del grupo.
En el equipo interdisciplinario participan personas de edades diversas, entre los 20 y los 50 años. Entre ellos hay expertos en rescate y materiales peligrosos, paramédicos e ingenieros, quienes se encuentran a la espera de que el Gobierno de México les avise si requiere de su apoyo, informó Hernández.
Para varios de los convocados, como Tatiana Mora, de 25 años, esta sería su primera experiencia de rescate internacional.
"Estoy a la expectativa de qué es lo que nos vamos a topar allá, y con la convicción y la actitud de que vamos a dar lo mejor como institución y como país", manifestó.
Sin embargo, Guido Vargas, encargado de seguridad del grupo, sabe que conforme avanzan las horas se reduce la posibilidad de que México requiera de sus servicios, por lo que en el transcurso de la noche las autoridades costarricenses decidirán si se mantienen a la espera o se desmoviliza la misión.