El costo propuesto por la empresa Globalvia para ampliar la ruta 27, entre San José y Caldera, es “alto” en criterio del Consejo Nacional de Concesiones (CNC).
La empresa concesionaria estimó que se necesitarán $646 millones para optimizar los 77 kilómetros de carretera entre el Parque Metropolitano La Sabana, en San José, y el acceso a puerto Caldera, en Puntarenas.
Para José Manuel Sáenz, secretario técnico de Concesiones, la propuesta presentada por la firma española tiene “oportunidad a la baja”. Precisamente, esa posibilidad será lo que comience a analizar el Consejo.
En ese período se revisarán las cantidades y precios planteados por la empresa para cada una de las obras y actividades propuestas. Se valorarían cambios para bajar esos costos.
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“Hay que acordarse que lo que había presentado anteriormente (la empresa) era de Escazú a Orotina, ahora estamos desde el Gimnasio Nacional hasta el final (Caldera) y es un proyecto óptimo, donde se están proponiendo cuatro carriles por sentido entre Circunvalación y el peaje, eso no estaba. Estamos pidiendo otras cosas que no estaban contempladas, que hacen que sea más efectiva, más funcional, pero hay oportunidad para ir a la baja”, sostuvo.
El funcionario detalló que, si bien la empresa presentó los documentos técnicos del proyecto y los costos de la inversión, aún debe entregar en un plazo de 30 días el modelo financiero.
La información debe incluir los costos operativos y a partir de ahí se comenzarían a elaborar los escenarios, donde se consideran variables fundamentales como tarifas de peaje e inversión estatal requerida.
“Habrá que ver si se baja el costo, cómo repercute en la tarifas. Si (el proyecto) lo hago por etapas, si esas etapas las acorto o las alargo, me da para más. Ahí podemos establecer el plazo de construcción si se hace por etapas, porque si se fuera a hacer de un solo pueden dar dos o tres años para completar todo, pero si se hace por etapas puede tomar hasta seis años completarlo”, explicó.
Dentro de ese mismo análisis se fijaría un tope para las tarifas de peaje.
Sáenz aseguró que de parte de la Administración hay “conciencia” de que será necesario un aporte estatal, pues diluir la inversión necesaria en tarifas de peaje al plazo planteado de 15 años elevaría el pago que recae en los usuarios.
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El funcionario reconoció que la posibilidad de extender el plazo por más de 15 años y así aminorar el impacto en las tarifas también será un aspecto a valorar. No obstante, adelantó que ya han visto que ampliar tanto los plazos no tiene un efecto significativo en las tarifas e implica conceder la administración de un bien por muchos años más.
Además, dijo, la ley limita concesiones a menos de 50 años; en el caso de la ruta 27, Globalvia ya tiene un contrato vigente por 25 años que vence en el 2033.
¿Cuándo se conocerán las tarifas?
El secretario de Concesiones admitió que es necesario iniciar cuanto antes la socialización del proyecto para que los usuarios conozcan los alcances de la obra y cuánto aumentarán los peajes para financiar la inversión.
Además evalúan si será necesario realizar una encuesta para ver cuánto estarían dispuestos a pagar los conductores que transitan por esa carretera.
Sáenz afirmó que ya cuentan con elementos para comenzar a reunir a los concejos municipales y explicarles los detalles del plan.
“Yo he insistido y estoy con Globalvia en que esto tiene que empezar lo antes posible”, agregó.
La estimación del CNC es que en marzo del próximo año se tendrá aprobado todo el plan de trabajo y que posteriormente el proyecto comience a desarrollarse por etapas.
En su planteamiento, Globalvia dividió el proyecto en tres secciones.
El primer trayecto iría desde La Sabana hasta la intersección de Siquiares, ahí la ruta tendría cuatro carriles por sentido entre el cruce de Circunvalación y el peaje de Escazú, y desde Multiplaza hasta el peaje de San Rafael, se ampliaría a tres carriles por sentido.
Además se incluyen mejoras en intercambios y un nuevo paso a desnivel en La Sabana.
La segunda sección se dividió en dos subtramos, el primero entre el intercambio de Siquiares y Balsa, y otro entre Orotina y Caldera.
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En ese trayecto la vía se ampliaría a dos carriles por sentido.
La tercera sección iría desde el intercambio de Atenas al intercambio de Orotina y comprende la ampliación a dos carriles por sentido en ese trayecto.
Globalvia además deberá construir las soluciones especiales que determinen los estudios para taludes y calzada, donde hay problemas de deslizamientos.
La necesidad de ampliar la ruta 27 se identificó desde el 2014, cuando la vía tenía apenas cuatro años de haberse puesto en servicio.
En ese momento, el tráfico promedio diario de vehículos por el peaje de Escazú era de 102.000.