Joe Biden visita por primera vez Canadá con la mira puesta en migración y comercio

Según reportes, Canadá aceptó recibir a unos 15.000 solicitantes de asilo de América Latina a través de canales legales

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Ottawa. La primera visita a Canadá del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, destinada a marcar la renovada amistad entre los dos países vecinos se espera que concluya este viernes con anuncios sobre Haití, la inmigración y la economía.

La agenda está cargada para el mandatario demócrata de 80 años que no pudo viajar a este país vecino y aliado inmediatamente después de su toma de posesión, como es costumbre de los presidentes estadounidenses, debido a la pandemia de covid-19.

A Biden lo recibirá el primer ministro Justin Trudeau para una reunión de trabajo. Posteriormente, hablará al Parlamento canadiense y, por último, los dos líderes darán una conferencia de prensa.

La relación entre Washington y Ottawa es infinitamente más cordial que durante la presidencia del republicano Donald Trump, pero hay algunos puntos conflictivos.

En uno de ellos, la inmigración irregular, la visita podría conducir a avances, aseguran Radio-Canada y el New York Times.

Inmigración irregular

Según los informes, los estadounidenses y los canadienses acordaron cerrar la Roxham Road, una ruta improvisada por la que unos 40.000 inmigrantes arribaron a Canadá el año pasado, sin pasar por los puntos de entrada oficiales de Estados Unidos.

Estas llegadas caldearon el ambiente político en Canadá, un país donde este problema es relativamente nuevo, y provocó cierta tensión con Washington.

En la Casa Blanca aseguran entender las preocupaciones canadienses, pero señalan que el tema también es de actualidad en Estados Unidos, en proporciones bastante diferentes.

En enero, las autoridades estadounidenses realizaron más de 128.000 arrestos por intentos de ingresar ilegalmente a territorio nacional desde México, y la derecha republicana no pierde oportunidad de acusar a Biden de falta de atención ante el fenómeno.

Los reportes indican que, a cambio del cierre de Roxham Road, Ottawa aceptó recibir a unos 15.000 solicitantes de asilo de América Latina a través de canales legales, una medida que aliviará la presión en la frontera sur estadounidense.

Ayuda para Haití

Otro tema de discusión será Haití, un país azotado por la extrema violencia de las pandillas y una grave crisis humanitaria.

Una fuente del gobierno canadiense dijo a AFP que este viernes se espera un anuncio de “financiación significativa”, relacionado con la ayuda humanitaria y la capacitación de las fuerzas de seguridad haitianas.

Washington acogería con agrado que Canadá desempeñe un papel de liderazgo en el envío de una fuerza internacional al país caribeño.

El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, informó este jueves sobre “discusiones con el gobierno canadiense para ver qué podemos hacer juntos, así como con otros países, los países de la Caricom (Comunidad del Caribe) y la región”.

El gasto militar también estará en la agenda bilateral, en momentos en que Washington presiona por un esfuerzo de los miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en medio de la guerra en Ucrania y las crecientes tensiones con China.

Ottawa está lejos de dedicar el 2% de su producto interno bruto (PIB) al gasto militar, el umbral fijado para los países de la alianza atlántica.

En particular, podría hablarse el viernes en Ottawa de una modernización del Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte (Norad).

Semiconductores y cadenas de suministro

La economía será un tema ineludible para estas dos naciones tan integradas.

Trudeau, cuyo país es el primer cliente de Estados Unidos en materia de comercio exterior, querrá avanzar sus fichas en el terreno económico.

Biden adoptó de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) un enorme plan de subvenciones para la transición energética, la “Ley de Reducción de la Inflación” (IRA), destinada a apoyar la producción y el desarrollo de tecnologías en suelo estadounidense.

Los principales socios comerciales de Estados Unidos temen que este giro reduzca sus ventas.

La fuente del gobierno canadiense dijo que espera que en la conferencia de prensa conjunta haya anuncios sobre semiconductores y el fortalecimiento de las cadenas de suministro en América del Norte.