Washington. Este martes, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, expresó que el gobierno israelí se opone a una solución de dos Estados con los palestinos e instó al primer ministro, Benjamin Netanyahu, a “cambiar” el ejecutivo.
Estas palabras reflejan un inusual desencuentro con Netanyahu, después de semanas en las que el líder estadounidense respaldó con firmeza la operación militar de Israel en la Franja de Gaza en respuesta a los ataques de Hamás del 7 de octubre.
“Bibi tiene que tomar una decisión difícil”, mencionó Biden, refiriéndose a Netanyahu y a su gobierno de derecha.
“Este es el gobierno más conservador en la historia de Israel” y, a diferencia de Washington, “no aboga por una solución de dos Estados”, afirmó Biden en un acto de campaña.
El presidente añadió que Israel está empezando a perder apoyo a nivel mundial y que Netanyahu “debe fortalecer y cambiar” el gobierno israelí para hallar una solución a largo plazo al conflicto israelí-palestino.
Estos comentarios reflejan una creciente división sobre lo que ocurrirá después de la guerra.
Los llamamientos de Estados Unidos para que el gobierno de Gaza quede en manos de una Autoridad Palestina fortalecida no fueron bien recibidos en Israel. Este martes, Netanyahu admitió que existe “desacuerdo” entre los aliados sobre la etapa post-Hamás.
Washington también instó a Israel a evitar víctimas civiles en Gaza, argumentando que hubo demasiadas muertes de palestinos.
Biden previamente advirtió que el respaldo internacional a Israel está en declive durante una ceremonia celebrada el lunes en la Casa Blanca en conmemoración de una festividad judía.
“Tenemos que tener cuidado. Ellos tienen que tener cuidado. La opinión pública mundial puede cambiar de la noche a la mañana, no podemos permitir que eso ocurra”, expresó a los invitados.