Cuatro ticos votando en Estados Unidos detallan por qué esta elección los decepciona

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

---

Son costarricenses residentes hace años en Estados Unidos, donde adquirieron su derecho a elegir quién llega a la Casa Blanca. Para este martes, todos decidieron apoyar a la candidata demócrata, Hillary Clinton, pero su decepción con la campaña, el debate de ideas y los candidatos es total.

Así lo expresaron esta mañana al ser consultados vía telefónica sobre cómo han sentido el nivel de discusión en la campaña y qué les ha parecido toda la dinámica de ataques personales y puntos de vista de ambos contendientes.

"Para mí ha habido problema con este tipo que es un payaso. Él es la persona más incapaz para llevar las riendas del país y lo único que he sentido, que le he pedido a Dios, es por favor que no permita a las comunidades hispanas en este país dejarse influir por la propaganda y los medios de comunicación", expresó Anabel Mora Rodríguez, vecina de Brentwood (Long Island, Nueva York) desde hace 30 años.

Para esta oriunda de San Joaquín de Flores, "cualquier persona con un poco de sentido común sabe que él no es la persona a elegir. No sé cómo lo viven y sienten personas de otras naciones acá en Estados Unidos, pero yo al menos no siento miedo. No tengo miedo de que Hillay Clinton pierda, hay algo dentro de mí que me dice que no va a perder y, si así fuera, solo queda ponerlo en manos de Dios y esperar lo mejor", manifestó.

Como ella, también se quejó de la campaña y de los candidatos Gonzalo Abarca, quien vive hace 20 años en Washington, donde trabaja como periodista y conductor del programa de televisión Foro Latinoamericano del Servicio Español de la Voz de América.

"Es decepcionante ver cómo el discurso político cayó verdaderamente a uno de señalamientos y golpes bajos cuando acá en Washington la discusión siempre ha sido rica y más elevada. Por desgracia, ambos candidatos --más Trump que ella-- han retrocedido a eso", se quejó.

Para este costarricense originario de San José, esta campaña provocó que hoy un votante promedio no tenga muy claro las posiciones de cada uno en asuntos como educación, economía o trabajo.

"Todo eso se obvió. Los votantes van a las urnas con muchas dudas. He votado en varias elecciones, pero esta es histórica al haber una mujer en el Partido Demócrata y tener de contrincante una persona del mundo del entretenimiento, más que un empresario. Esto es clave porque una de estas dos personas lleagrá a cambiar una serie de políticas de Obama, incluso si llega Clinton", expresó.

Bianchi Suárez Valverde, residente hace 13 años en Virginia, también lamentó el nivel de la campaña.

"En todo este proceso hemos visto que hay mucho en riesgo y desafortunadamente el candidato del Partido Republicano es una persona por completo despreciable por su forma de pensar y cómo se ha expresado de los latinos y las mujeres. Es una vergüenza. Ha sido bastante candente la campaña y para mí es inconcebible que haya mujeres hispanas que lo apoyan", manifestó Suárez, quien es trabajadora social en una agencia de adopción.

Para Suárez, la elección ha carecido de contenido y propuestas concretas de ambos contendientes. En esta elección, opina, la discusión es completamente diferente y "un nivel más piso de tierra por decirlo de alguna manera".

"Ha sido muy cansado, pero eso no puede hacer que uno se vuelva insensible a lo que está pasando y eso es lo que nos mantiene conectados con la contienda. Es cansado oír las discusiones pero hay mucho en juego y hay que seguir pendientes", manifestó.

Si para Suárez ha ido cansado el nivel de la campaña, lo ha sido más para Antonio José Porras, de 23 años (y seis años en EE. UU.), quien está cursando una maestría en física en la Universidad Vanderbilt, en Nashville, Tenesí, uno de los estados considerados más republicanos de ese país.

"Aquí la mayor parte de la gente vota republicano y a la gente le encanta Trump. Este Estado lo va a ganar de fijo; sin embargo, por mi residencia en Carolina del Norte, hacia donde va mi sufragio, es posible que mi voto contribuirá más allí que como votante acá. Uno como latino aquí lo tiene muy difícil, la gente parece no utilizar la lógica y solo usa la visión de Trump que, en síntesis, es que los blancos son superiores", lamentó el joven procedente de Barrio Pinto, en San José.

Porras afirma que si algo le ha dejado la campaña es un prolongado ejercicio de paciencia.

"Aún rodedado de opiniones radicales, hay que respetarlas y eso es lo más difícil; incluso ante posiciones racistas. Pienso que si uno tiene el privilegio de votar, sin importar en qué país, eso es importante porque es contribuir. El hecho de votar por Hillary básicamente no es mucho por ella, ella tiene sus cosas que son debatibles. Voté por ella más por evitar que llegue Trump", afirmó.

Para el tico, todos los debates fueron un circo basado en insultos donde nunca hubo discusión de problemas reales o soluciones a estos. Por desgracia, concluye, eso es lo que a "muchas personas les gusta y le ha generado popularidad a Trump".