Mediador internacional llega a Siria para recabar apoyo para la conferencia de paz

Lakhdar Brahimi, emisiario de la ONU, busca de una solución política para acabar con la guerra civil que consume a país sirio desde marzo del 2011

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Damasco

El emisario especial de la ONU y la Liga Árabe, Lakhdar Brahimi, llegó este lunes a Damasco para recabar apoyo para la conferencia de paz, en momentos en que Rusia criticaba con dureza las amenazas de los rebeldes contra quienes participen en dicha reunión.

Brahimi, que venía de Beirut en coche, llegó al hotel Sheraton, ubicado en el centro de Damasco, acompañado por el viceministro sirio de Asuntos Exteriores Faysal Moqdad, en el marco de una gira para preparar esta conferencia llamada de "Ginebra 2".

Se trata de la primera visita de Brahimi a Damasco desde diciembre de 2012. Entonces había exhortado a un cambio "real" en Siria y a la formación de un gobierno de transición dotado de plenos poderes.

Las amenazas de unos 20 grupos islamistas sirios que rechazaron categóricamente la conferencia de paz "Ginebra 2", apoyada por Estados Unidos y Rusia para encontrar una salida política a la guerra civil, complica aún más la misión de Brahimi, de 79 años, quien fue nombrado emisario para Siria por la ONU y la Liga Árabe en septiembre de 2012.

Moscú calificó de "indignantes" este lunes estas amenazas. "Es indignante que algunas de estas organizaciones extremistas, terroristas que luchan contra las fuerzas gubernamentales en Siria , empiecen a amenazar (...) a aquellos que tienen la valentía" de concurrir a estas conversaciones de paz, declaró a la televisión el canciller ruso Serguei Lavrov.

Unos 20 grupos islamistas sirios rechazaron categóricamente el sábado por la noche "Ginebra 2", agregando que los eventuales participantes en esta conferencia cometerán una "traición" de la cual deberán responder "ante nuestros tribunales".

"Para nosotros se trata de un elemento adicional del complot destinado a hacer descarrilar nuestra revolución y terminar con ella", insistieron esos grupos, algunos de ellos integrantes del Ejército Sirio Libre.

La oposición siria, muy dividida en lo que respecta a una eventual participación en esta conferencia de paz que ya fue postergada en varias oportunidades, exige garantías de que la misma desembocará en la renuncia del presidente Bashar al Asad, a lo que el régimen se opone enérgicamente.

Para Thierry Pierret, un experto del islam en Siria , estos grupos islamistas "representan a una franja muy amplia de la oposición armada, desde los salafistas radicales del Frente Islámico Sirio hasta grupos mucho más moderados que son pilares del Ejército Sirio Libre".

"Por lo tanto, cabe afirmar que el rechazo de Ginebra 2 en las filas de los insurgentes es casi total (...) Una parte importante de la oposición política no querrá correr el riesgo de participar en una conferencia que le quitaría lo que le queda de legitimidad ante los grupos armados", agregó.

Además, "aunque haya opositores que participen en Ginebra 2 y lleguen a un acuerdo, dicho acuerdo no tendrá valor ninguno", puntualizó.

Por su parte, la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) había anunciado el domingo haber recibido en los plazos requeridos el programa de destrucción del arsenal químico de Siria , previsto por una resolución de la ONU adoptada tras un acuerdo entre Estados Unidos y Rusia.

La resolución de la ONU sobre el desmantelamiento del arsenal químico sirio alejó la amenaza de un ataque militar estadounidense, lanzada tras un mortífero ataque con armas químicas atribuido al régimen sirio, el 21 de agosto, cerca de Damasco.