Tragedia en Baltimore destaca contribución de obreros latinos en Estados Unidos

Los inmigrantes latinos representaban el 8.2% de la fuerza laboral de Estados Unidos en 2021, pero constituían el 14% de las muertes en el lugar de trabajo

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Los Angeles. La muerte de seis obreros latinos en el derrumbe del puente de Baltimore esta semana destaca el contraste entre el papel que desempeñan los inmigrantes para mantener en marcha a Estados Unidos y el discurso de Donald Trump, quien los retrata como “invasores” y “criminales”.

“Los migrantes ocupan empleos que los estadounidenses no desean”, afirmó Luis Vega, activista y exobrero de la construcción. “¿Quién desea limpiar habitaciones de hotel? ¿Quién quiere trabajar bajo el sol? ¿Quién desea laborar en el campo?”, cuestionó.

Seis trabajadores procedentes de México, Guatemala, El Salvador y Honduras fueron las únicas víctimas mortales del derrumbe ocurrido el martes en el puente Francis Scott Key, en el puerto de Baltimore. Estos hombres, junto a otros dos obreros que lograron sobrevivir, estaban reparando baches en el puente cuando colapsó tras ser impactado por un carguero.

“Los inmigrantes realizan la labor”, afirmó Tom Perez, director de la Oficina de Asuntos Intergubernamentales de la Casa Blanca, en una entrevista con MSNBC el jueves. “Y eso fue lo que hicimos hace un par de noches, las seis personas que fallecieron y los dos que sobrevivieron. Esto es Estados Unidos: los inmigrantes reparando los baches”, añadió.

La noticia conmocionó a la comunidad hispana en Estados Unidos en un momento en el que líderes políticos como el expresidente Trump, quien se encuentra en campaña contra el demócrata Joe Biden por la Casa Blanca, abogan por mayores restricciones a los inmigrantes, a quienes califican repetidamente como delincuentes que deben ser expulsados del país.

“Es triste porque el expresidente no reconoce cuánto daño genera en la gente. (...) Los terroristas no ingresan por la frontera, ingresaron por avión con visa”, expresó Vega, quien fue uno de los líderes de una campaña a favor de la migración en Arizona en 2010, la cual contó con el respaldo de figuras como la cantante Shakira, la modelo Vanessa Bryant y el beisbolista Sergio Romo.

“En 2020, durante la pandemia de COVID, el expresidente (Trump) acusó a los indocumentados de criminales, narcotraficantes, violadores, de todo”, lamentó.

“Los inmigrantes son quienes sacaron adelante a Estados Unidos, ya que durante el COVID nadie quería trabajar físicamente, estar en contacto con otras personas. Entonces, ¿quién realizaba las labores? ¿Quién hacía la limpieza en los hospitales? ¿Quién producía alimentos? Los inmigrantes. Ellos arriesgaron sus vidas”, insistió.

Los inmigrantes enfrentan un alto riesgo de explotación. Trabajan jornadas extenuantes, en condiciones precarias y a cambio de salarios bajos, señaló Javier Galindo, un contratista con base en Tucson, Arizona, quien inició su carrera en la construcción a los 14 años.

“En los techos nunca verás a un trabajador blanco, algo que yo mismo he tenido que hacer”, comentó Galindo. “Generalmente, estos son trabajos realizados por inmigrantes procedentes de México y siempre son riesgosos”, agregó.

En estados como Arizona, donde el salario mínimo por hora es de $14.35, los obreros reciben entre $80 y $100 por día. “Y sabes a qué hora entras, pero no a qué hora sales”, puntualizó Galindo. La constante necesidad económica obliga a los inmigrantes a aceptar empleos en sectores riesgosos, con condiciones que pueden ser letales, como las altas temperaturas.

Según cifras oficiales, los inmigrantes latinos representaban el 8,2% de la fuerza laboral de Estados Unidos en 2021, pero constituían el 14% de las muertes en el lugar de trabajo. Además, los accidentes fatales aumentaron un 42% entre 2011 y 2021, pasando de 512 a 727.

Galindo sostiene que en su región, la construcción depende enteramente de inmigrantes, con los indocumentados desempeñando un papel crucial. “Hace falta mucha mano de obra”, señaló el contratista de 48 años, cuya actividad se vio gravemente afectada por el cierre de fronteras durante la pandemia de COVID, y quien, al igual que Vega, aboga por la legalización de los trabajadores.

Este sentimiento es compartido en el sector. “Si solo contratáramos a personas con documentos, nos iría muy mal”, expresó otro contratista de Arizona que prefirió mantenerse en el anonimato para evitar represalias. “Lamentablemente, no podríamos llevar a cabo la construcción que se está realizando en esta ciudad si no fuera por los trabajadores indocumentados”.