Crisis de agua en Bogotá provoca que multen a quienes ‘lleven al despilfarro’ de ese líquido

El hecho obedece a fenómeno climatológico del Niño y el calentamiento global

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Bogotá. La alcaldía de Bogotá, en Colombia, empezará a multar a despilfarradores de agua ante la grave sequía que llevó a la ciudad a un inédito racionamiento que no logró los resultados esperados, anunció este lunes el mandatario de la capital colombiana, Carlos Fernando Galán.

“Vamos a empezar a imponer multas por acciones irresponsables que lleven al despilfarro de agua”, dijo el alcalde en una rueda de prensa.

Desde el jueves pasado, unos 10 millones de personas en Bogotá y municipios aledaños sufren cortes programados en el servicio del acueducto en un intento por subir el nivel de agua en los embalses que los abastecen. Pero las medidas no han sido suficientes en un país azotado por el fenómeno climatológico de El Niño y los efectos del calentamiento global.

Las multas irán desde los 700.000 hasta 1,2 millones de pesos colombianos (180 a 310 dólares), informó Galán.

Lavar automóviles, motocicletas o bicicletas en vía pública y verter desperdicios como jabón y aceite a los cuerpos de agua serán algunas de las acciones castigadas. El alcalde aseguró que la policía hará recorridos para detectar a los infractores en flagrancia.

Desde que se inició la emergencia, los barrios de Bogotá no tienen agua durante 24 horas cada 10 días y según el turno que les corresponda.

Antes de arrancar con el racionamiento, la alcaldía se propuso reducir el consumo de agua en 11 metros cúbicos por segundo, pero Galán afirmó este lunes que el ahorro ha sido de 1,8 metros cúbicos, por lo que las restricciones podrían ser más importantes en los próximos días.

Sin establecer el monto de los castigos, el alcalde añadió que los hogares que excedan cierto consumo mensual de agua también tendrán que pagar más dinero.

“El consumo básico (...) es de 11 metros cúbicos al mes, por esta razón quienes consuman más de 22 metros cúbicos al mes van a tener un cobro adicional en la tarifa”, sostuvo.

A la par, el fantasma del racionamiento de energía sobrevuela Colombia ante el bajo nivel en las hidroeléctricas, que entrarán en una fase crítica si bajan del 27%, dijo Alejandro Castañeda, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras de Energía.

Actualmente están en 29,7%, alertó el jefe de la asociación en entrevista con Blu Radio: “Cada vez estamos más cerca (de tener cortes de energía), tenemos menos de tres puntos porcentuales de holgura y nada que llueve”, sostuvo.

Este lunes, el presidente Gustavo Petro se reunirá con el ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, para discutir sobre las posibles medidas ante la crisis.

“Nueva realidad”

La ONG ambientalista Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) califica a Colombia como una “potencia hídrica mundial” por sus humedales, ríos, lagos, lagunas, y ciénagas.

La Calera, una comunidad de Bogotá, desde hace semanas esta región considerada rica en recursos hídricos sufre una escasez sin precedentes esta localidad está en las faldas del parámo Chingaza, cuyos embalses proveen 70% del agua que llega a Bogotá. Pero el nivel de ellos bajó y dejó al descubierto islas de tierra. Según las autoridades es su peor momento desde la década de 1980, cuando fueron construidos.

El alcalde local, Juan Carlos Hernández, describe cómo se ha vaciado la quebrada de San Lorenzo, fuente de agua del municipio. “Se nos ha bajado el caudal: de 23 litros por segundo que teníamos la posibilidad de captar hemos bajado hasta nueve, diez litros por segundo”, asegura.

La sequía exaspera a Lorena Lee, propietaria de una cafetería en La Calera, que ha debido reducir los horarios de atención en su negocio mientras no hay agua. Incluso no tiene cómo cocinar alimentos a los clientes.

Tras el inicio del racionamiento, la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, aseguró que la sequía obedece a una “nueva realidad climática” y condiciones a las “que la ciudad y la región se tienen que adaptar”.

Muhamad calcula que recién a finales de abril o inicios de mayo volverá a llover para aliviar la emergencia en los embalses.