Kabul. Varios hombres armados atacaron el lunes antes del amanecer la academia militar de Kabul, informaron a la AFP varias fuentes oficiales, el último atentado de una ola de violencia que golpea a la capital de Afganistán.
El ataque, que comenzó cerca de las 5 a. m. (hora local) con lanzamientos de cohetes y disparos de armas automáticas y de granadas, seguía en curso más de tres horas después, afirmaron a la AFP varios testigos, incluyendo una fuente de seguridad.
"Contabilizamos cuatro asaltantes. Tres soldados afganos fueron heridos y ahora los asaltantes están bajo asedio de las fuerzas especiales afganas", precisó una fuente que pidió no ser identificada.
"Se produjo una gran explosión delante de la entrada, el batallón respondió. Yo no creo que hayan podido entrar", indicó a la AFP un oficial que estaba en el lugar y que dijo temer que haya varias "víctimas".
El portavoz de la policía de Kabul, Basir Mujahid, dijo a la AFP que había habido lanzamientos de cohetes y disparos, pero que ahora la situación estaba "calmada".
No hubo una reivindicación inmediata del ataque, que se produce dos días después de un atentado que dejó más de 103 muertos y 235 heridos.
Este ataque perpetrado con una ambulancia bomba provocó conmoción y llevó al gobierno a decretar un día de duelo nacional el domingo y un día no hábil el lunes para que la ciudad pueda ocuparse de los heridos.
Kabul ha sido blanco recientemente de varios ataques perpetrados tanto por los talibanes como el por grupo Estado Islámico (EI), convirtiendo a la ciudad en uno de los lugares más peligrosos del país para los civiles.
El 20 de enero, un comando de los talibanes golpeó el hotel Intercontinental de Kabul, provocando la muerte de, al menos, 25 personas, la mayoría de ellos extranjeros.
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Sin embargo, todavía persisten dudas sobre el balance y divergencias entre las cifras del gobierno y los reportes de la prensa afgana que informó que hubo más víctimas.
La ciudad está en alerta máxima temiendo que se produzcan nuevos ataques.
Los extranjeros han sido advertidos de posibles ataques del EI contra supermercados, hoteles y tiendas frecuentadas por extranjeros.