“Modesto pero audaz, liberal y amante de la diversión”. Así justificó la revista británica The Economist su elección de Uruguay como país del año en el 2013.
La apertura de esta nación suramericana en asuntos sociales y políticos, como la implementación de la venta de marihuana en farmacias, la legalización del aborto, el matrimonio homosexual y la llegada de presos de Guantánamo, le han valido el título de vanguardista .
Además, goza de un crecimiento económico que sobresale en la región. Uruguay sobrevivió a la crisis internacional del 2008 y se prevé que registre su duodécimo año de crecimiento consecutivo, tras cerrar el año pasado con una expansión del 4,4%.
En el segundo trimestre del 2014 el producto interior bruto (PIB) creció 3,7% en relación con el mismo periodo del año anterior, según datos oficiales.
Pese a este balance positivo, la inflación representa uno de los frentes de lucha del Gobierno, que apunta a mantenerla en solo un dígito. En octubre el índice de precios al consumo (IPC) sumó un aumento de 8,1% para los últimos 12 meses, por encima del rango meta fijado entre 3% y 7%, señala la agencia AFP.
El incremento económico podría llevarse a cabo de una forma más paulatina a partir del 2015 y este será uno de los principales retos que deberá encarar el nuevo mandatario elegido hoy en un “segundo round ”.
El político Luis Lacalle Pou, del Partido Nacional, se enfrenta en el balotaje al expresidente y candidato del Frente Amplio, [[BEGIN:INLINEREF LNCVID20141129_0002]]Tabaré Vázquez[[END:INLINEREF]], a quien las encuestas dan una ventaja del 55% frente a un 40% de su opositor.
En la primera ronda del 26 de octubre, Vázquez, quien representa el continuismo de la izquierda uruguaya , obtuvo 47,8%, y Lacalle Pou, de centroderecha, 30,9% de los votos.
Para que alguno de los aspirantes sea elegido presidente, es necesario que obtenga la mitad más uno de los votos.
A los desafíos del nuevo mandatario, se suma también la necesaria continuidad de las políticas sociales que han dado frutos y son parte del reconocimiento atribuido a la izquierda desde su llegada al poder en 2005, durante el mandato de Vázquez.
El Frente Amplio ha logrado consolidar una baja en los niveles de pobreza, que se ubicó en 2013 en 11,5%, así como erradicar la indigencia y mantener un desempleo bajo, cerca del 6%.
Además, el actual mandatario, José Mujica , tiene una alta popularidad, ya que se ha caracterizado por un estilo de vida sencillo, alejado de cualquier lujo.
Pendientes. Pese a estas virtudes, Uruguay presenta aún rezagos en seguridad y educación.
Daniel Zovatto, politólogo y director regional de IDEA Internacional, considera que la seguridad es el principal problema que aqueja al país, pues se reportan ocho homicidios por cada 100 mil habitantes.
“Ha habido un aumento de casi el 80% del número de homicidios y también aumentó el número de atracos y de robos; esta es una de las paradojas de Uruguay. El otro gran tema pasa por cómo mejorar la calidad de la educación”, explicó Zovatto.
El nuevo mandatario también deberá confrontar la implementación de la venta de la marihuana en farmacias, luego de que la ley fuera aprobada en diciembre.
Fuentes del Gobierno indicaron a la AFP que el proceso avanza lentamente porque no hay antecedentes de este sistema y se quiere “hacer las cosas bien”.
La legalización de la marihuana es rechazada por Lacalle Pou y vista con recelo por Vázquez.
Otro tema promovido por Mujica y que generó polémica en el país fue el acuerdo del mandatario con el Gobierno de Estados Unidos para recibir como refugiados a seis presos de Guantánamo, una decisión que anunció en marzo, pero que se fue dilatando.
La llegada de los presos no es vista con buenos ojos por los uruguayos (60% lo desaprueba, según la consultora Cifra) ni por el opositor Lacalle Pou.
Los avances de Uruguay son múltiples, como también lo son los retos que deberá asumir el ganador de estos comicios, ya sea Tabaré Vázquez, quien se perfila como favorito, o Luis Lacalle Pou, quien podría dar la sorpresa.