Iraníes se burlan del discurso de Donald Trump sobre acuerdo nuclear

Trump amenazó con poner fin al acuerdo nuclear firmado por Irán con las grandes potencias mundiales

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Teherán

Los iraníes reaccionaron el sábado con ira y burlas a las críticas belicosas lanzadas contra su gobierno por el presidente estadounidense, Donald Trump, que amenazó con poner fin al histórico acuerdo nuclear firmado por Irán con las grandes potencias mundiales.

La utilización por Trump del término "Golfo Arábigo" en lugar de "Golfo Pérsico" irritó profundamente a los iraníes, conocidos por su nacionalismo, que se abalanzaron sobre las cuestas Twitter e Instagram de Trump.

Las redes sociales y las páginas web de información publicaron imágenes de lápidas y medallas de soldados estadounidense muertos en la región con la mención "Golfo Pérsico", al tiempo que pedían a Trump que las mirase cada día "para mejorar su geografía".

LEA: Donald Trump choca con otras potencias al rehusar certificar acuerdo nuclear con Irán

Un millón de comentarios fueron publicados en su cuenta Instagram, en su mayoría escritos en persa. "El golfo pérsico existía incluso antes de que Cristóbal Colón descubriese América", se podía leer.

Incluso el ministro iraní de Relaciones Exteriores, Mohamad Javad Zarif, reaccionó burlándose del presidente estadounidense. "Todo el mundo sabe que la amistad de Trump se vende al mejor postor. Ahora sabemos que su geografía también", tuiteó.

Discurso

El viernes en la Casa Blanca, el presidente estadounidense calificó al régimen iraní de "dictadura" y de "respaldo al terrorismo". Teherán "siembra muerte, destrucción y caos en el mundo" y "la agresión de la dictadura iraní continúa cada día", lanzó.

También amenazó con "anular" el acuerdo nuclear de 2015 firmado entre Irán y los países del grupo 5+1 (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania) si el Congreso estadounidense y los aliados de Washington no logran endurecer los términos del acuerdo.

Por su parte, el trío formado por Francia, Reino Unido y Alemania reaccionó, así como Rusia, afirmando que siguen comprometidos con el acuerdo nuclear y criticando la postura de Trump.

Trump desató asimismo la ira de los iraníes por haber intentado mostrar simpatía hacia ellos: muchos internautas fustigaron su "hipocresía" recordando su decisión de prohibir la entrada de ciudadanos de Irán en Estados Unidos.

"Ayer por la noche estaba furiosa. Ese individuo odia tanto a Irán que incluso si estás en desacuerdo con las ideas del régimen, apoyas el poder", reaccionaba Leyla, una iraní de 42 años que dirige un comercio de productos artesanales en Teherán.

LEA: El acuerdo histórico sobre el programa nuclear de Irán

"Trump prohibió a los iraníes ir a Estados Unidos ¿cómo puede decir que está del lado de los iraníes?", agregaba.

"Profiere tantos insultos que es para vomitar. Creo que su discurso estuvo tan lleno de odio que aportó apoyo mundial para Irán", afirmaba.

Pese a la virulencia de sus palabras, la estrategia de Trump no es finalmente tan dura como algunos habían imaginado. Así, se abstuvo de clasificar a los Guardianes de la Revolución –el Ejércio de élite iraní– entre las organizaciones terroristas.

"La táctica de los Guardianes funcionó, Trump no se atrevió a clasificarlos entre los grupos terroristas", escribía en portada el diario ultraconservador Kayhan.

LEA: Las potencias tienen mucho que perder si el acuerdo nuclear con Irán se rompe

El líder de los Guardianes había amenazado a Estados Unidos, afirmando que si lo hacía tendría que desplazar sus bases militares en la región a 2.000 kilómetros de los misiles iraníes.

El viernes por la noche, el presidente iraní Hasan Rohani tomó la palabra tras el discurso de Trump para fustigar "sus acusaciones sin fundamento" y sus "insultos", afirmando que su homólogo estadounidense no conoce la ley internacional porque no puede él solo "anular un acuerdo multilateral".

El congreso estadounidense dispone ahora de 60 días para volver a imponer o no las sanciones estadounidenses suspendidas tras el acuerdo nuclear, o decidir otras nuevas.

"Si el Congreso impone nuevas sanciones, el acuerdo estará muerto e Irán reanudará su programa nuclear pacífico a toda máquina (...) para mostrar a los estadounidenses que si matan el acuerdo, tendrá consecuencias", declaró Mohamad Marandi, profesor de política internacional y especialista de Estados Unidos en la Universidad de Teherán.