Hong Kong. AFP. El jefe del Gobierno hongkonés, Leung Chun-ying, tendió ayer la mano a los manifestantes que piden más democracia y se ofreció a reabrir el diálogo, en un gesto inesperado, una semana después de suspender las conversaciones para acabar con las protestas.
El vuelco en la postura del Gobierno local llegó un día después de la difusión de un video que mostraba a agentes que golpeaban brutalmente a un manifestante.
“En los últimos días, hemos hecho saber a los manifestantes que nos gustaría abrir un diálogo sobre el sufragio universal cuanto antes, si es posible la próxima semana”, dijo, en rueda de prensa, Leung.
El dirigente rechazó ahondar en el contenido del video y pidió que no se “politizara” el incidente, aunque aseguró que las autoridades ya han abierto una investigación “imparcial ” para aclarar lo ocurrido.
Cambio de parecer. Leung reabrió la puerta a las discusiones una semana después de cancelar repentinamente un primer encuentro con los contestatarios, que reclaman su dimisión y la instauración de un verdadero sufragio universal.
Queda por ver el resultado de estas negociaciones, pese a que Pekín se niega a ceder el control que mantiene sobre los candidatos locales.
El Gobierno Central chino aceptó el principio del sufragio universal en las elecciones en Hong Kong del 2017, pero prevé seguir controlando el proceso electoral y conservar el control sobre los candidatos.
Por ello, es muy poco probable que Pekín cambie de opinión, como ya ha avisado Leung.
Las protestas , que al principio se ganaron la simpatía de la ciudadanía, han perturbado fuertemente el ritmo de la ciudad, al provocar inmensos atascos y obligar a cerrar escuelas y comercios.