Daniel Ortega expulsa al enviado del papa Francisco

Monseñor Waldemar Stanislaw Sommertag dejó Nicaragua el domingo pasado, por orden del régimen de Daniel Ortega

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ciudad del Vaticano. El Vaticano dijo este sábado recibir con “sorpresa y dolor” la decisión del Gobierno de Nicaragua de retirar el beneplácito al nuncio de Managua. Monseñor Waldemar Stanislaw Sommertag, quien residía en Nicaragua desde el 2018. El enviado del papa Francisco recibió la orden de “dejar inmediatamente el país”, informó la oficina del pontífice en un comunicado.

La Santa Sede calificó de “incomprensible” la decisión, “ya que durante su misión monseñor Waldemar Stanislaw Sommertag ha trabajado incansablemente por el bien de la Iglesia y del pueblo nicaragüense”. El nuncio dejó el país el pasado domingo, según supo esta semana la AFP a partir de una fuente diplomática.

El presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, el obispo Carlos Herrera, afirmó el martes en Canal 10 que las relaciones “no eran buenas” entre Sommertag y el gobierno de Daniel Ortega, y que probablemente el papa Francisco le iba a pedir que renunciara. Pero en su comunicado, el Vaticano afirmó haber recibido “con sorpresa y dolor” la notificación de que el gobierno había retirado su beneplácito al nuncio Sommertag.

La Santa Sede declaró que el nunció procuró “favorecer las buenas relaciones” entre las autoridades y la Iglesia Además, afirmó estar convencida “de que esta grave e injustificada decisión unilateral no refleja los sentimientos del pueblo de Nicaragua, profundamente cristiano”.

El representante permanente del Vaticano llegó a Managua en mayo de 2018, cuando el país era azotado por masivas manifestaciones antigubernamentales, en las cuales la Iglesia Católica fue mediadora para buscar una salida a la crisis. El nuncio participó como testigo en la segunda etapa de un diálogo, realizado en 2019, que fue suspendido sin resultados.

Las relaciones entre el gobierno y los obispos de la Iglesia católica son tensas, tras las protestas de 2018. El oficialismo acusa al clero de haberse coludido con sus opositores para un golpe de Estado, como califica esas manifestaciones.

Daniel Ortega, de 76 años, fue reelegido para un cuarto mandato en noviembre. Más de 40 críticos del gobierno fueron detenidos en Nicaragua entre junio y diciembre de 2021, incluidos siete potenciales rivales electorales de Ortega. A este grupo se suman otras 120 personas encarceladas por participar en las protestas antigubermantales de 2018.