Analista internacional: ‘Hay hastío por la política exterior de Erdogan’

El analista internacional, Sergio Moya, ve una posible causa del intento de golpe en Turquía en el involucramiento del país en otros conflictos.

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En cuatro oportunidades, desde 1960, el Ejército turco protagonizó golpes de Estado en aras de mantener el respeto a los valores laicos que constituyen la base de la República Turca, fundada por Mustafa Kemal Atatürk.

El analista internacional, Sergio Moya, ve una posible causa del intento de golpe en Turquía en el involucramiento del país en otros conflictos.

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¿Obedecerá este intento de golpe al malestar por la islamización que busca imponer el presidente Recep Tayyip Erdogan?

A falta de que los acontecimientos terminen por definirse, lo que es claro es que, en un sector del Ejército, hay hastío con la gestión de Erdogan , pero no tanto por el tema de la islamización sino por su política exterior temeraria de los últimos años.

¿A qué llama usted una política exterior temeraria?

Pasar de una política exterior de cero problemas con los vecinos a tener problemas con todos o casi todos: con Israel, con Siria, con Armenia, con Rusia, inclusive el derribo de un avión militar ruso.

”Este hecho tuvo consecuencias muy negativas para la economía turca, porque los rusos le declararon un embargo comercial. Además, por un lado, Turquía le ofrecía las bases militares a los rusos, siendo el país miembro de la OTAN.

”Por otra parte, la intervención de Erdogan en Siria, apoyando a la oposición, acabó involucrando al país en un conflicto que no era suyo y ha hecho recrudecer el conflicto interno con los kurdos. El acuerdo de paz que había con los kurdos se rompió y ahora hay una guerra contra el PKK (el principal grupo kurdo) que deja muertos todos los días.

”Me parece que Turquía está en una regresión a los años 90, cuando el Ejército hacía política de tierra arrasada en el Kurdistán. Erdogan, al principio, se presentaba como un reformador, como un hombre progresista, pero ahora todo esto se ha revertido”.

La Constitución turca les da a los militares el papel de garantes del Estado laico...

Desde el inicio de la República (1923), Turquía adopta una constitución nacionalista, secular, en un país 99% musulmán. Cada vez que los militares sintieron que los Gobiernos se apartaban de los valores señalados en la Constitución, intervinieron.

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Erdogan está ignorando los valores fundadores, pero fue electo democráticamente.

Ciertamente, hay un déficit democrático. Erdogan se ha encargado de encarcelar periodistas, a miembros del parlamento, ha querido copar a la Corte Suprema de Justicia, y tiende hacia políticas autoritarias.

”Lo paradójico es que, a pesar de todo eso, cuenta con un importante apoyo popular. Es un régimen con legitimidad democrática pero que no se atiene a las prácticas de la democracia liberal. Sin embargo, el golpe no se justifica porque hay mecanismos en la Constitución establecidos para dirimir conflictos internos”.

¿Cómo afectaría a Europa un golpe de Estado en Turquía?

El de Turquía es el segundo ejército más grande de la OTAN, es muy poderoso y está en una línea de confrontación con Rusia. Lo que menos necesita la OTAN en este momento es que un miembro tan vital como Turquía empiece a cojear. Debe haber tensión en las cancillerías.

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