Alemania evitará la recesión este año, según las previsiones del gobierno anunciadas el miércoles 25 de enero, después de que la mayor economía de Europa superara mejor de lo esperado las consecuencias de la guerra en Ucrania.
Según las últimas previsiones del ministerio de Economía, Alemania crecerá un 0,2% en 2023.
A finales del año pasado el gobierno todavía auguraba una contracción del PIB del 0,4% en un contexto de subida de los precios de la energía para el sector industrial y de caída del poder adquisitivo.
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Muchos institutos económicos y expertos también habían pronosticado una caída de la riqueza en 2023, pero en las últimas semanas revisaron al alza sus previsiones.
Alemania resistió, afirmó el ministerio de Economía, destacando la resiliencia de la actividad frente a la crisis energética.
El ministerio destacó en particular los esfuerzos de los consumidores por ahorrar energía después de que Rusia retirara progresivamente sus suministros de gas el año pasado.
La semana pasada, el jefe del gobierno, Olaf Scholz se mostró convencido de que el país no entraría en recesión.
Los precios de la energía han bajado en los últimos meses, gracias a un invierno suave en Europa y a los esfuerzos de Alemania por aumentar su suministro de gas natural licuado.