Costa Rica terminará por segundo año consecutivo con el mayor déficit en el Gobierno Central de América Latina y República Dominicana.
Así se desprende de las proyecciones el Fondo Monetario Internacional (FMI) para 18 países.
La proyección del FMI es que el déficit (exceso de gastos sobre ingresos, principalmente por impuestos) representará un 5,6% de la producción. La estimación del ministro de Hacienda, Fernando Herrero, es que sea cerca de un 5% de la producción.
Este es el resultado más preocupante que deja la economía en el 2011, según varios economistas consultados.
El año también se caracterizó por un crecimiento moderado en la producción.
Además, será el tercer año consecutivo en el cual el país logra mantener una inflación baja y estable, con lo cual se ubica entre las naciones con el menor indicador en la región.
Holgura se agotará. Para el coordinador del Programa Estado de La Nación, Miguel Gutiérrez, el país gastó este año parte del margen que tiene para manejar el problema fiscal.
“No hay mucho tiempo para aportar soluciones fiscales de fondo, antes de que cierta holgura en materia de endeudamiento se termine de agotar. Sin estas soluciones, se tendrá que escoger de qué manera se incrementará la pobreza y la desatención de la inversión pública: si por la vía del recorte de programas de inversión y combate a la pobreza, o por la vía de la inflación inducida por un gasto sin financiamiento”, comentó Gutiérrez.
El presidente del Banco Central, Rodrigo Bolaños comentó que este año dicho déficit no presionó las tasas de interés porque la demanda de crédito del sector privado fue poca. Sin embargo, advirtió: “A Hacienda ya le está costando mantener el nivel de tasas”.
Para el expresidente del Banco Central y exministro de Hacienda, Francisco de Paula Gutiérrez, este año fue un año de transición pues todavía se viene saliendo de una crisis.
Fue además, un año “de consolidar aspectos positivos que se lograron como es el caso de la inflación, de crecimiento moderado, pero en un mundo que crece poco, es un crecimiento satisfactorio, pero con vulnerabilidades que tenemos que enfrentar. Las pudimos tolerar este año, pero no las podemos tolerar hacia futuro; estoy pensando fundamentalmente en el tema fiscal”, dijo.
Déficit externo. Otro déficit que preocupa, pero en menor medida, es el déficit en cuenta corriente, el cual también terminará este año cerca del 5% de la producción, menor al 9% que el país tuvo en el 2008, que fue el más alto de la última década.
Dicho déficit surge del exceso de importaciones de bienes y servicios sobre las exportaciones.
Hasta ahora, dicho déficit ha sido financiado con recursos de inversión extranjera directa (por ejemplo, empresas foráneas que se instalan en el país, compran locales o reinvierten), lo cual se considera sano.
No obstante, el coordinador del Estado de la Nación señaló que el país no debería gastar estos recursos de esta forma.