El freno al crecimiento del crédito en los primeros tres meses de vigencia de la medida (entre el 31 de enero y el 30 de abril) fue mayor de lo que el Banco Central (BCCR) esperaba.
En ese periodo, el incremento total de los préstamos fue del 1,7%, mientras la estimación del ente emisor era de un aumento del 3,9%.
El Central estableció límites al crecimiento del crédito a partir de febrero, por nueve meses, para evitar que el exceso de liquidez que había en el momento se convirtiera en préstamos que afectaran la inflación y para evitar los riesgos de la dolarización.
Para préstamos en colones, el límite es del 9% en esos nueve meses, y para dólares existen dos opciones. La primera es que los bancos cuya cartera en dólares del 2012 creció menos del 20% puedan aumentar en esos nueve meses en un 6%. La otra posibilidad es que aquellas entidades cuya cartera en dólares se incrementó más del 20% puedan crecer en estos nueve meses una tercera parte de lo que crecieron el año pasado.
De acuerdo con los datos suministrados por el presidente del Banco Central, Rodrigo Bolaños, el incremento fue menor en colones que en dólares.
Esta semana, la entidad anunciará si mantiene o no la medida al publicar la revisión del Programa Macroeconómico.
Expectativa. Economistas, banqueros y empresarios consultados esperan que la entidad opte por eliminarla; no obstante, algunos consideran que quitarla tampoco es condición suficiente para reactivar la producción.
“Las señales de política económica que envían las autoridades causan incertidumbre; es importante eliminar la restricción y evitar encarecer el crédito para devolver la confianza al sector productivo y propiciar el desarrollo y crecimiento económicos”, comentó Luis Mesalles, vicepresidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep).
“La Asociación Bancaria espera que el Banco Central elimine las restricciones al crecimiento del crédito. Este sería un buen mensaje para mejorar las expectativas de los inversionistas e iniciar un proceso de reactivación de la actividad productiva”, dijo María Cortés, directora ejecutiva de la Asociación Bancaria Costarricense (ABC).
Para Anabelle Ortega, directora ejecutiva de la Cámara de Bancos, uno de los objetivos principales del BCCR es promover el desarrollo ordenado de la economía; por ello considera que la revisión deberá estar enfocada en estimular la producción del país, para lo que resulta de fundamental importancia que se elimine la restricción al crédito.
El economista Max Alberto Soto, director del Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas, comentó que, por sí sola, la eliminación de la restricción no va a reactivar la economía, pero no hacerlo sin duda va a retardarla.
Por su parte, el economista Thelmo Vargas opinó que la restricción al crédito opera como un factor adverso, un tanto psicológico, y debe eliminarse.