Feliz año no. No es al año a quien deseo felicidad. Es a ustedes.
Será, sin duda, un año real, con todo lo que tienen los años reales. Eventos dulces y propicios. Alegrías y sinsabores. Cuestas y planicies. Ilusiones y desalientos.
Les deseo la disposición para ver las dificultades como retos y no como calamidades. La capacidad para ponerle ilusión a muchas cosas, y pasión a algunas. Y la sensatez para escoger las formas de acción que aumentan la probabilidad de lograr éxitos.
Buscamos la felicidad. Leíamos ayer que todo ser racional tiende a su propia felicidad de una manera necesaria, siempre y en todas partes, sin que sea libre para rechazarla o renunciar a ella. La felicidad es dinámica. La felicidad estática es la que tiene una vaca que tiene accesibles buenas pasturas. La vaca vive. El ser humano transita el camino de su vida. La vaca ya es todo lo que puede llegar a ser.
El ser humano siempre puede llegar a ser de manera más intensa o más perfecta. Por esa razón, la felicidad de hoy no es la de mañana.
Lo que queramos lograr en el año, empecemos a gestionarlo pronto. Está más a mano reducir la ingesta hoy, que matricularse en el gimnasio mañana. En la empresa, está más cerca el reducir costos que el aumento en las ventas. Y en el Gobierno, miren a las frutas maduras y bajitas y apresúrense a producir resultados. Es alta la probabilidad de que los grandes planes no se realicen ; que la estrategia no sea lo que estamos pensando mientras otros resultados.
Diversos recursos. Este año traerá su lote de desafíos individualizado para cada uno. Los de él no serán los mismos que los de ella. Comparar nuestro lote de desafíos con el del vecino, es fantasear y perder energía. Solo podemos acometer este año con los recursos que ya tenemos disponibles. Son los que son y tienen la potencia que tienen. Y los tuyos son diferentes a los de él. Reconozcámoslos. No los ignoremos.
Seremos mucho más eficaces, cada uno concentrado en su parcela de realidad, empeñado con ilusión y con pasión en la aplicación de estos recursos específicos de los cuales se dispone. Eso es acción realista. El resultado de expandir un poco la conciencia.