La Fed podría dar un poco de aire fresco a las economías emergentes

Alejar la posibilidad de incrementar la tasa de interés es un estímulo para países altamente endeudados

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París. Las economías emergentes, lastradas por la desaceleración del comercio mundial y, sobre todo, por el descenso en la demanda china, podrían recobrar fuerzas gracias a la Reserva Federal estadounidense (Fed), que recientemente abrió la puerta a un recorte de las tasas.

Tras haber mantenido el nivel de las tasas hace una semana, el presidente de la Fed, Jerome Powell, explicó el martes que querían evitar “reaccionar exageradamente” con una relajación inmediata de la política monetaria del banco frente a los temores generados por las tensiones comerciales entre Washington y Pekín.

Si bien su discurso fue menos complaciente de lo previsto, alejó la perspectiva de una nueva alza de las tasas, lo que habría reforzado la transferencia de capitales a Estados Unidos, donde las inversiones son menos riesgosas, o aumentó el precio del servicio de su deuda en dólares.

"Como la normalización de la política monetaria en Estados Unidos está frenada, cuando no invertida, esto quizá relajará a los mercados y las condiciones de financiación para los países emergentes", explicó a la AFP Sébastien Jean, director del Centro de Estudios Prospectivos y de Informaciones Internacionales (CEPII).

“Para algunos países, quizá pueda tener un efecto de ganga”, agregó, mencionando a las economías emergentes que se lo puedan permitir. Pues disponen de un margen de maniobra para relanzar su crecimiento financiándose en los mercados sin temor a una subida de las tasas.

Un soplo de aire fresco muy esperado en un momento en el que los países emergentes presentan unas tasas de crecimiento hundidas “por unas inversiones débiles y la desaceleración pronunciada del comercio mundial”, como explicó hace poco el presidente del Banco Mundial, David Malpass.

"Una tasa baja en Estados Unidos es, a priori, una buena noticia para los países emergentes, sobre todo para Argentina, porque esto crea incitaciones algo más fuertes para que haya flujos" hacia esos países, indicó a la AFP Jens Arnold, responsable para Argentina y Brasil del departamento de economía de la OCDE.

Aún así, los problemas para los emergentes distan mucho de haber desaparecido: las tasas todavía no han bajado y el dólar se ha reforzado. Pero esta situación no es comparable con las fuertes devaluaciones, hace un año, de monedas como el real brasileño o la lira turca, cuando la Fed reajustó su política monetaria.

Además, que la Fed vaya a bajar las tasas no es más que una hipótesis, de momento, pues el crecimiento estadounidense continúa a pleno rendimiento. Y, si el banco central estadounidense decidiera bajarlas, esto no supondría necesariamente una buena noticia, sino más bien el resultado de la guerra comercial.

"Si hay una buena noticia sobre la política monetaria estadounidense, es también porque hay una mala sobre el ciclo económico", recordó Sébastien Jean.

Aversión al riesgo

También hay que tener en cuenta la "aversión al riesgo" que caracteriza a los mercados en este momento, como subrayó Sean Darby, del banco de inversiones estadounidense Jefferies, en una conferencia en París.

"Hemos entrado en una fase en la que habrá menos subidas de tasas de las que esperábamos. Es, cuanto menos, positivo", reconoció François Faure, jefe para las economías emergentes del centro de investigación de BNP Paribas.

"Lo que pasa en China es necesariamente negativo para los países emergentes", afirmó a la AFP, en alusión a la bajada de las exportaciones de materias primas hacia el gigante asiático, en las que se apoyaron durante mucho tiempo las economías emergentes.

Para Faure, las tasas son, en cualquier caso, altas como para que los países emergentes puedan financiarse en los mercados, sobre todo Argentina, que está en recesión. "No solo los argentinos no quieren, sino que no podrían. Más vale, pues ya están fuertemente endeudados", sostuvo.

Darby, sin embargo, constató que los bancos centrales de los países emergentes están distanciándose de la Fed.

"Esta vez, mucho antes de que la Fed haya decidido actuar, varios bancos centrales de países emergentes bajaron sus tasas, como los de Malasia, Filipinas o India", destacó.

“El divorcio entre los emergentes y la Fed se ha vuelto bastante claro”, consideró el analista de Jefferies, citando el caso de Rusia, que esperó a que llegara el anuncio de la Reserva Federal antes de bajar su tipo básico el viernes pasado.