La demanda mundial de oro alcanzó en 2022 su nivel más alto desde 2011, impulsada por las compras récord de los bancos centrales, según un informe del Consejo Mundial del Oro (WGC) publicado el martes.
La demanda de oro para todo el año 2022 se situó en 4.740,7 toneladas, un 18% más que en 2021.
“La gran sorpresa del año fue obviamente la demanda récord de los bancos centrales, que alcanzó su nivel más alto en 55 años, con compras de más de 800 toneladas solo en el segundo semestre”, declaró Louise Street, analista de la organización.
La demanda de estas instituciones alcanzó 1.135,7 toneladas en 2022, frente a las 450,1 toneladas del año anterior.
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El oro es muy apreciado por los bancos centrales, que lo utilizan “como depósito de valor a largo plazo”, en particular en tiempos de inflación, explicó la analista.
Por su parte las compras de lingotes y monedas de oro siguieron atrayendo a los inversores. En total, la inversión en lingotes y monedas ascendió a 1.217,1 toneladas en 2022, frente a 1.190,9 toneladas en 2021.