San José
La actividad económica está perdiendo impulso, según lo muestra el resultado a enero pasado del índice mensual de la actividad económica (IMAE), que publicó esta tarde el Banco Central.
El indicador, que procura medir la variación en la cantidad física de bienes y servicios que se producen en nuestro país, aumentó en noviembre del 2016 un 4,58% respecto a igual mes del año anterior, luego bajó a 4,30% en diciembre y a 3,80% en enero.
Los datos corresponden a la variación interanual (de cada mes respecto al mes anterior) de los resultados de la serie tendencia ciclo, la cual excluye factores estacionales e irregulares.
Diez de los 15 grupos de actividades que componen el IMAE aumentaron menos en los últimos dos meses.
Entre las actividades que se desaceleran se encuentran la industria manufacturera, los servicios financieros y la agricultura, aunque siguen mostrando tasas positivas de crecimiento.
En servicios financieros, el Banco Central explica que la desaceleración obedece a un menor crecimiento del crédito en moneda extranjera y de las captaciones por depósitos de ahorro a la vista y cuenta corriente.
El economista Hermann Hess consideró que la desaceleración es significativa tanto en relación con su nivel de hace un año (en enero del 2016 aumentó 4,46%), como en comparación con el más reciente breve episodio de expansión del período entre octubre y noviembre recién pasados.
“Lo que más preocupa es la aparente naturaleza sistémica del fenómeno ya que muchos sectores importantes muestran desaceleraciones significativas durante el último año, registrando proporciones muy considerables de entre 6% y 8% en los casos de electricidad, actividades financieras y transportes; cuyos niveles de actividad suelen ser indicativos de lo que sucede en la economía como un todo”, dijo Hess.
“Es notable que la agricultura, la construcción y el comercio, que mostraron recuperaciones importantes durante la mayor parte de este período, también muestran una tendencia a atenuar su crecimiento en los meses más recientes”, añadió.
Hess también llamó la atención sobre que los únicos sectores que muestran aumentos en sus tasas de crecimiento son -con excepción de actividades profesionales- actividades que potencialmente pueden alimentar los problemas fiscales, como lo son en gran medida las actividades de enseñanza y desde luego la administración pública, por lo que habrá que ponerle atención a las fuentes de financiamiento de dicha expansión.
De acuerdo con el autoridad monetaria, en enero, el aporte al crecimiento interanual se explica en 63% por las industrias de servicios; 18,3%, por la manufactura; 12,1%, por la construcción y 6,2% por la actividad agropecuaria.
En las industrias de servicios sobresalen aquellos ligados al comercio exterior, tales como actividades administrativas y de apoyo de oficina, consultoría en gestión financiera, recursos humanos y afines.
En su comentario, el Banco Central destaca que el número de asegurados de la empresa privada, registrados en la Caja Costarricense de Seguro Social aumentó, en enero 2017, en 40.205 personas respecto a igual mes del 2016 (variación interanual de 4,4%).
Lo anterior, principalmente en las actividades inmobiliarias, alquiler, servicios empresariales, comercio, reparación de vehículos automotores, y agricultura, ganadería, caza y silvicultura.