Trabajadores con más de 8 años de cesantía tributarían

Perjudicados serían empleados solidaristas y con convenciones

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Un trabajador que reciba un pago por cesantía mayor a ocho años, afrontaría un 15% del impuesto de la renta sobre el monto obtenido por encima de ese tope.

Por ejemplo, si son 15 años de pago de prestaciones, por los primeros ocho años no tributaría, pero por los siguientes pagaría un 15%.

Esto sería así si prospera la iniciativa de reforma de impuesto sobre la renta propuesta por el Ministerio de Hacienda.

Actualmente, explicó el exdirector de Tributación, Alan Saborío, el empleado no tributa sobre las prestaciones y para la empresa son un gasto deducible para calcular el impuesto sobre la renta.

El tema preocupa al Movimiento Solidarista Costarricense, pues los trabajadores de este sector pueden recibir más de ocho años de prestaciones.

Los servidores amparados a convenciones colectivas, que tienen topes de cesantía más altos a los ocho años, pasarían a tributar sobre esta renta.

Raúl Espinoza, presidente del Movimiento Solidarista, explicó que uno de los beneficios ofrecido por el solidarismo es que los empleados acumulan cesantías superiores a los ocho años y es un derecho del trabajador que puede obtener si renuncia o si lo despiden. La empresa, detalló, aporta cada mes entre un 3% y un 5,33% para la cesantía del trabajador.

“Hace muchos años, un trabajador tenía derecho hasta un máximo de ocho años de cesantía (…), eso hasta que se creó el solidarismo, que parte de las conquistas es ese rompimiento del tope de la cesantía para los que están en una asociación solidarista”, señaló Espinoza.

Su preocupación es que el tributo propuesto podría desestimular a los trabajadores a permanecer en las asociaciones después de los ocho años.

El director general de Tributación, Carlos Vargas, dijo que los estímulos se mantienen.

“Lo que pasa es que permanecer en la asociación le garantiza un ingreso por cesantía, yo casi que no vería tanto el desestímulo porque siempre se va a seguir percibiendo el año adicional por cesantía, va a estar gravado, pero siempre se percibiría”, opinó.

Excedentes. Otro aspecto que preocupa a Espinoza es que a los excedentes distribuidos por el solidarismo se les cambiaría el sistema de impuestos.

Ahora, los excedentes afrontan un tributo de renta de 5%.

Con la reforma propuesta, los excedentes que sean menores al salario mínimo exento, que actualmente es de ¢793.000, se mantendrían con la tarifa del 5%, pero a los que sean mayores de ese monto se les aplicarían las tarifas que se usan para el salario.

A dichas tarifas se les crearon dos tramos más, de 20% y 25%, lo cual haría, según Espinoza, que para quienes reciben excedentes altos, la tarifa del impuesto hasta se les multiplique cinco veces.

Vargas respondió que quienes reciben excedentes de ¢4.450.000 deben de tener bastante ahorrado, entonces, se trataría de personas , quienes tiene unos ingresos altos.