A partir de ahora, el Ministerio de Cultura exigirá a los directores de sus 14 entes adscritos, así como de cinco programas, fiscalizar y responder por las compras realizadas durante su gestión.
Además, en adelante, un equipo de tres personas será responsable de las contrataciones para eventos como la Feria del Libro y el Festival de las Artes. Antes, esas decisiones las tomaba una sola persona.
Las medidas son las primeras que implementará ese ministerio para combatir irregularidades en la contratación de proveedores.
Lo anterior se da luego de que la actual jerarca de Cultura, Elizabeth Fonseca, denunciara anomalías en los programas de la cartera.
El Ministerio también trabaja en la creación de un manual para homologar los procesos de compras. El documento estará listo en el transcurso del 2015. Adicionalmente, capacitará a directores y funcionarios sobre la Ley de Contratación Administrativa y su reglamento .
“Estamos ejerciendo controles para que no ocurran los errores del pasado”, comentó Luis Carlos Amador, oficial mayor y director ejecutivo del Ministerio de Cultura.
Una investigación de La Nación, publicada ayer, evidenció que la empresa Luz Art S.A. multiplicó en casi ocho veces sus contratos con Cultura y sus dependencias durante los cuatros años en que los músicos Manuel Obregón e Iván Rodríguez fueron ministro y viceministro de esa cartera (2010-2014).
Luz Art es proveedora de iluminación y sonido. Es la misma empresa que desde hace una década trabaja en los conciertos del grupo musical Malpaís, del cual son miembros Obregón y Rodríguez.
Entre 2010 y 2014, esa compañía ganó ¢456 millones en 15 contratos con el Ministerio de Cultura.
Antes de ello, el Teatro Melico Salazar la había contratado dos veces, por ¢33 millones.
Otra publicación de este medio también mostró que en la gestión de Obregón y Rodríguez los contratos de los programas denunciados por Fonseca se concentraron en una sola proveedora. En ese lapso, Luz Art fue adjudicada por ¢99 millones.
Todas las contrataciones mencionadas son parte de una investigación del Ministerio Público.
Objetivos. Según explicó Amador, con la fiscalización de los directores del Ministerio se pretende un control previo, durante y posterior a las adjudicaciones.
También se otorga un papel más activo a los funcionarios vinculados a los procesos de contratación. “Los mandos medios no asumen responsabilidades, pero deben hacerlo”, dijo Elizabeth Fonseca, ministra de Cultura.
El Ministerio de Cultura utiliza el sistema electrónico de compras CompraRed del Ministerio Hacienda, que no es completamente digital y solo hace públicas algunas fases del proceso.
En este sentido, Ottón Solís, diputado de Acción Ciudadana y miembro de la Comisión de Control de Ingreso y Gasto Público, opinó que la transparencia de las compras debe reforzarse con sistemas completamente digitales.
Solís agregó que las instituciones también deberían utilizar las páginas web para transparentar y mejorar el acceso de los ciudadanos a los contratos.