Chris Gardner, un vendedor de felicidad cuenta aquí su secreto

En charla a 2.500 empresarios dirá que la mejor inversión es en el capital humano

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Costa Rica, el país donde su gente se declara la más feliz del mundo , albergará mañana una charla de Chris Gardner, centrada en cómo ser más aún dichosos. El hombre en quien se basó el filme La búsqueda de la felicidad compartirá su secreto con unas 2.500 personas.

Antes de hablar en el centro de eventos Pedregal , a empresarios principalmente, el conferencista motivacional refirió algunos consejos. La desconexión digital, por ejemplo, es uno de sus trucos.

No tiene Facebook ni Twitter ni computadora personal porque –afirmó ayer–, está “ocupado trabajando” y para él las redes sociales pueden ser en realidad “distracciones para escapar de uno mismo”.

“¿Por qué es importante desconectarse? Porque puedo escucharme. Hay quienes no desean escucharse. Por eso los tuits , la Internet, el Facebook se vuelven tan importante para algunos: porque no quieren escucharse. Se vuelven antisociales con ellos mismos”, afirmó.

Su aversión a las redes sociales es tal que, como empleador, también lo molesta cuánto de las ocho horas de trabajo por las cuales se le paga a alguien, se malgastan en “estas otras cosas”.

“Cuando miras a alguien al teléfono o en la computadora, con solo mirar su lenguaje corporal sabes si esa llamada o esa sesión en el teclado es trabajo o es pura porquería”, lanzó Gardner. Y habla en serio.

El empresario y dueño de una firma corredora de valores recientemente despidió a su hijo Chris Jr.

“El reloj que utiliza mi hijo tenía un problema: no tenía impresos los números 8 y 9 y, por eso ahora busca una carrera en el negocio musical”, comentó Gardner sobre qué le ocurre a quien llega tarde en su firma.

Ante la pregunta: ¿Qué ve la gente en usted y las hace conectar con su persona? Él responde: “Creo que miran eso que desean ver en ellos mismos. Me ven y piensan: ‘si él lo hizo, yo puedo’. Yo hablo de asuntos que les resultan cercanos y las personas se conectan con eso”.

Hora del abrazo. Luego de 30 minutos de conferencia de prensa en el hotel Sheraton, Gardner pasó casi el mismo tiempo repartiendo abrazos y posando junto a periodistas y fotógrafos que al final de la sesión querían su instantánea con él; gráficas donde sus sonrisas siempre parecían más amplias que la de él.

Otras sugerencias las ofreció a futuros emprendedores. Nada nuevo, pero sí útil de recordar: “hay que centrarse en algo que uno ame”, “no dedicarse solo a hacer dinero” y “solo tú puedes ver ese sueño, tienes que verlo con los ojos del alma y nadie más debe verlo, excepto tú”.

Otra clave es apreciar el “ahora”. Gardner tuvo que aprenderlo.

Por mucho tiempo en su vida, recordó, fue como muchas personas tratando de llegar a la próxima meta, o victoria u oportunidad, pero siempre perdiéndose en el proceso el placer del “ahora”.

“En EUA, sobre todo los hombres, se cree que lo que haces es lo eres, pero para quienes hemos sido despedidos a veces, no es así. Es cuando te haces grandes preguntas: ¿me conocen mis hijos?, ¿los conozco yo? La llamada crisis económica fue la oportunidad para muchos de descubrirlo”, concluyó.