El Ministerio de Ambiente (Minae) donó 136 metros cúbicos de madera proveniente de la trocha fronteriza al Ministerio de Educación Pública (MEP), que la utilizará para la fabricación de pupitres y en obras de infraestructura.
Esa donación se firmó ayer y es producto de la primera extracción de trozas derivadas de la construcción de la ruta 1856, más conocida como la trocha fronteriza.
Los árboles corresponden al sector de Llanos de Pocosol, en Los Chiles de Alajuela.
Se trata de 34 árboles de caobilla, roble sabana, pilón, guabo, corteza amarilla, tamarindo, gavilán y amarguito, entre otras especies.
Según la viceministra de Ambiente, Ana Lorena Guevara, el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) era el encargado no solo de inventariar la madera, sino de extraerla y almacenarla; todo, bajo supervisión del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac).
“El Conavi no lo había hecho antes debido a que se sometió a proceso de licitación y quedó desierto en dos oportunidades. No hubo quién quisiera ir a recolectar la madera, y quisiera que eso se sepa, porque no fue un tema de no cumplir, sino que se dieron procesos de licitación que quedaron desiertos”, enfatizó Ana Lorena Guevara.
La madera se trasladó a un patio de acopio ubicado a diez kilómetros del sitio de extracción. Ese patio se encuentra cerca de la Policía de Frontera, que se encargará de la vigilancia.
En total, y según Guevara, se prevé que se extraerán 1.570 metros cúbicos de madera. Serían unos 392 árboles. Considerando las especies y que la madera proviene de bosque, cada árbol representa cuatro metros cúbicos de madera.
“Aún tenemos que coordinar el tema de transporte con la Dirección Regional del MEP en la zona norte”, aclaró la viceministra de Ambiente.