Fenómeno El Niño se intensificó en fin de año

Se prevé que la fase de apogeo continúe durante el mes de enero

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Un cálido invierno en Canadá, tornados en EE. UU., inundaciones en Argentina y Paraguay, así como inusuales nevadas en México, se deben a que el fenómeno El Niño ganó intensidad el fin de año y se prevé que continúe así durante enero.

El Niño – Oscilación del Sur (ENOS) nace de la interacción de las aguas superficiales del océano Pacífico con la atmósfera, lo cual afecta las precipitaciones en el trópico e influye en el clima de otras regiones.

Es un fenómeno natural que ocurre en periodos de tres a siete años. En su fase cálida, se conoce como El Niño y en su fase fría, como La Niña.

Si bien no existe una relación directa entre cambio climático y ENOS, el primero sí afecta al segundo, ya que la acumulación de gases efecto invernadero –causantes del cambio climático– propician un calentamiento que sirve de base a El Niño. En otras palabras, un planeta más caliente provee más energía y, por tanto, intensifica el ciclo hidrológico.

Por esa razón, y según el Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC), ENOS se está volviendo más frecuente e intenso. Incluso, algunos escenarios que se proyectan debido al cambio climático se asemejan a las condiciones ambientales vividas durante los ciclos de El Niño.

“El Niño no hace sino acentuar la tendencia al calentamiento”, señaló Michel Jarraud, secretario general de la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

Según la OMM, el 2015 parece haber sido el año más caliente del que se tenga registro.

“La temperatura promedio en la superficie terrestre superará sin duda el umbral simbólico y significativo que constituye un calentamiento de un grado centígrado en relación con la era preindustrial”, detalló OMM.

“A escala planetaria, estamos realmente ante un año excepcional, es un poco más de una décima de grado más cálido que el 2014, que a su vez había sido un año récord. De un año al otro, una décima es un salto importante”, destacó Jean Jouzel, del IPCC.

A prepararse. Según el Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno El Niño (CIIFEN), se espera un repunte en el primer trimestre del 2016.

Esto se manifestaría en déficit de lluvias en Centroamérica, el Caribe, Brasil, Colombia y Venezuela, así como en incremento de lluvias en Ecuador, Perú, Chile, Uruguay y Paraguay.

“El Niño demuestra en cámara rápida lo que el cambio climático está haciendo al planeta y permitirá conocer la efectividad de las inversiones realizadas en adaptación, poniendo a prueba los sistemas nacionales de gestión del riesgo de desastres y en evidencia los avances logrados y los problemas pendientes de solución”, comentó Rodney Martínez, director del CIIFEN.

Por eso, la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres urge a los países a fortalecer los modelos de reducción del riesgo de desastres y a invertir en ciencia.