Sin importar su edad, género o lugar de residencia, el daño ambiental es la mayor preocupación de los jóvenes ticos.
Los problemas ambientales los inquietan más que la seguridad, la pobreza, la discriminación, el arte, el deporte o la recreación y participación.
Así lo reveló la encuesta Tu voz vale, una iniciativa del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
El estudio contó con el apoyo de otras organizaciones como el Consejo de la Persona Joven, el Patronato Nacional de la Infancia (PANI), el Ministerio de Educación Pública, la Fundación Acción Joven, Visión Mundial, Guías y Scouts de Costa Rica, TEDx Joven, Fundación Monge, Defensa de Niños Internacional, Fundación Paniamor, Parque La Libertad, Cruz Roja, Coalición Costarricense de Organizaciones Sociales para el Seguimiento de la Convención de los Derechos del Niño (Cosecodeni) y el Centro Nacional de Cooperativas (Cenecoop).
Fueron entrevistados 9.226 jóvenes, con edades entre 12 y 21 años.
El cuestionario se aplicó en el 2014 y su objetivo era visibilizar las preocupaciones de la juventud en Costa Rica.
“Tu voz vale empezó como un sueño de colocar en la agenda nacional la voz de los adolescentes y los jóvenes, una deuda pendiente del país y fundamento de todo desarrollo integral”, explicó Tanya Chapuisat, de Unicef.
De hecho, los resultados ya le fueron presentados a la vicepresidenta de la República, Ana Helena Chacón, así como a otras autoridades del Gobierno.
El 75% de los entrevistados priorizó lo ambiental entre sus preocupaciones, pero no se limitó a exponer su inquietud; también propuso soluciones.
Por ejemplo, instaron a las municipalidades a ejecutar planes de reciclaje y a realizar festivales ecológicos para incentivar una cultura de respeto al planeta.
También abogaron por proyectos de limpieza, siembra de árboles, energías alternativas y educación ambiental.
Los jóvenes ven en el voluntariado una oportunidad para el trabajo conjunto, la promoción de valores y la concientización.
Otros resultados. La segunda y tercera causa de inquietud cambia según donde residan.
Mientras que a los que viven en la Gran Área Metropolitana (GAM) les atemorizan la inseguridad causada por asaltos y la discriminación, en las provincias costeras esa intranquilidad se relaciona con pobreza y estudio.
Si el análisis se hace por género, a los hombres les angustia la seguridad y la discriminación, mientras a las mujeres les inquieta la posibilidad de estudio, la violencia y el no ser escuchadas.
"Esperamos que esta información le ayude al gobierno a implementar soluciones", dijo Karolyn Escamilla, joven de 20 años, quien tuvo a cargo la presentación de los datos.