Uno de cada cinco estudiantes asiste a un centro de educación privada, según reveló el Censo 2011, cuyo trabajo de campo se realizó del 30 de mayo al 3 de junio del año pasado.
De acuerdo con este estudio, en el país hay cerca de 1.194.000 personas mayores de cinco años que asisten a los centros educativos, y de este total, unos 266.000 lo hacen en escuelas, colegios o universidades privadas (el 22%).
Esta es la primera vez que se realiza esta consulta en un censo; por lo tanto, no hay datos históricos para seguir la evolución.
El resultado del Censo sobre asistencia a centros privados es mayor del que hasta ahora se conocía en el país.
Según los datos de matrícula de preescolar, primaria y secundaria del 2012 del Ministerio de Educación, más los datos de estudiantes universitarios proporcionados por la Unión de Rectores de Universidades Privadas (Unire) en el país hay cerca de 1.269.000 estudiantes, de los cuales unos 233.000 asisten a centros educativos privados, un 18% del total.
Según el Censo, por provincia, en San José el 30% de los estudiantes asisten a centros privados, le sigue Heredia con 29%, Cartago con 23%, Alajuela con 18%, Guanacaste con 15%, Puntarenas con 13% y Limón con 12%.
Por cantón, hay algunos como Escazú, Montes de Oca y Santa Ana donde casi la mitad de los estudiantes asisten a centros educativos privados.
Pública sigue fuerte. Tanto el ministro de Educación, Leonardo Garnier, como la coordinadora del Estado de la Educación, Isabel Román, explicaron que en preescolar, primaria y secundaria la asistencia a la educación privada es mucho menor que en la superior.
Román comentó que los datos deben desagregarse por edad. “Cuando esto se hace los datos de los que asisten a centros privados en primara baja a 9,6% y en secundaria a 11, 4%. El mayor porcentaje que asiste a centros privados corresponde a los que van a la universidad”, comentó.
Precisamente por la importancia que mantiene la educación pública en preescolar, primaria y secundaria, Garnier y Román justifican que se continúe reforzando su presupuesto.
“Desde nuestro punto de vista del Estado de la Nación, la educación pública sigue siendo el corazón de la educación nacional. Asimismo, en los últimos 10 años el sistema público ha mostrado ser crecientemente incluyente, al aumentar la asistencia de los chicos que vienen de los quintiles más bajos de ingreso”, comentó Román.
Controles a particulares. Ambos especialistas coinciden, además, en que un desafío es aumentar los controles a la educación privada.
“En el caso del control de la educación privada el tema es un desafío nacional urgente planteado por el Informe (del Estado de la Educación). Hoy por hoy, sabemos muy poco de lo que en ellos ocurre; ni siquiera datos desagregados de matrícula por institución tenemos a nivel superior. Menos sobre precios que cobran y calidad de lo que ofrecen”, comentó Román.