Tributación inicia plan piloto para exigir factura electrónica a profesionales

Proceso comienza en 15 días con un grupo de entre 20 y 25 personas

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La Dirección General de Tributación envía cartas esta semana a los colegios profesionales para que estos inviten a sus asociados a participar en el plan piloto de la factura electrónica.

Dicho plan se iniciará en 15 días y tardará tres meses.

Carlos Vargas, director general de Tributación, explicó que en esta primera etapa participarán entre 20 y 25 personas.

“La idea nuestra es tener un grupo relativamente reducido de profesionales que utilicen la herramienta inicialmente para generar un proceso de evaluación práctica del aplicativo, para ver si genera algún problema, si hay alguna inconsistencia, si cumple las expectativas que ellos pueden tener para poder utilizarlo”, detalló el funcionario.

Vargas prefirió no especificar los colegios a los cuales invitan hasta que estos reciban la carta.

Otros profesionales que quieran participar pueden enviar un correo electrónico a Walter Gamboa (gamboarw@hacienda.go.cr); no obstante, Tributación valorará si pueden ingresar dentro de este grupo reducido.

Facturas tendrán validez. La factura electrónica es un documento digital, que ya se usa en el país; no obstante, Tributación quiere hacerlo obligatorio este año.

A la persona que compra le llega por correo electrónico un detalle parecido a las facturas que envía el ICE para los recibos de teléfono. Llega junto con un archivo que puede ser procesado por Tributación y también se puede imprimir un comprobante.

Vargas detalló que las facturas que emitan los profesionales en el plan piloto tendrán validez para efectos tributarios.

La creación de la factura electrónica obligatoria fue una de las medidas que anunció la presidenta de la República, Laura Chinchilla, el 18 de abril del 2012, ante la ausencia del plan fiscal.

El objetivo es tener un instrumento para verificar los ingresos de los profesionales, los cuales son importantes para determinar el impuesto sobre la renta (el cual se aplica sobre la diferencia entre ingresos y gastos).

La Contraloría General de la República ha denunciado, en varios estudios, que los profesionales tienen altos niveles de evasión en el tributo sobre la renta.