San José (Redacción). La presidenta de la República, Laura Chinchilla, negó, en conferencia de prensa, que la imagen del país se haya visto afectada por el escándalo que la envuelve tras su viaje a Perú el 11 de mayo en un avión prestado por un polémico empresario colombiano.
La presidenta dijo que la imagen del país está muy por encima de este problema y dijo que “ha tenido repercusión, más que nada, a lo interno de la nación”
Chinchilla dio las declaraciones a un día de asistir a la cumbre de presidentes de la Alianza del Pacífico, en Calí, Colombia.
Consultada por la prensa, la mandataria afirmó que irá en un vuelo comercial.
El polémico viaje de la mandataria, produjo la renuncia del ministro de Comunicación, Francisco Chacón, tras aceptar que un empresario colombiano lo engañó con una identidad falsa antes de prestarle al Gobierno un jet en el que Chinchilla viajó a Perú.
Días después, la mandataria anunció, en cadena nacional, la renuncia del director de la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS), Mauricio Boraschi, así como a su asistente personal, Irene Pacheco.
Chinchilla alegó que tanto Boraschi como Pacheco, no cumplieron con sus obligaciones en la verificación del origen del avión facilitado para sus viajes.